El momento se dio cuando Simón Oliveros y Karla Constant entraron a una construcción en Ñuñoa, donde se llevaron una gran sorpresa,
En los primeros minutos del programa, la conductora Karla Constant se trasladó junto a Simón Oliveros desde el Mega para hacer un despacho con el Mucho gusto.
Ambos rostros llegaron hasta una construcción en Ñuñoa, donde se encontraron con dos obreros que les ofrecieron un café para acalorar la nublada mañana.
Uno de ellos, el que tenía más desplante ante la cámara, se llamaba Ricardo “El Viejo Loco” Covarrubias, quien tomó las riendas de la entrevistas, mientras le servía un desayuno calentito a los invitados de la tele.
En medio de la conversación, se animó a piropear a Constant: “Vaya dónde usted quiera”, le dijo. “Que es buenamoza usted”.
Acto seguido, Oliveros se agarró de esas palabras y el le dijo:
—Ya, pero espérese, hagamos una cosa, usted la encuentra atractiva...
—Sí.
—Con respetó, sí —acotó Constant, mientras desde el estudio Soledad Onetto pedía “un piropo, un piropo”.
—... ¿Cómo se llama su compañera que trabajaban con el Repenning? —cambió de tema abruptamente el constructor.
—¿Sole Onetto? —le preguntaron los de Mega.
—No, la otra niña que se fue al 13.
—¡La Priscilla (Vargas)! —lanzó Constant entre risas.
—Mencione al “Repe” y hágala completa —disparó Oliveros, haciendo referencia a la partida del periodista a la competencia en Inés Matte Urrejola.
—¿Qué pasó con el “Repe? —preguntó “El Viejo Loco”.
—Se fue po’ —le respondieron a coro.
—Ah —contestó él—, algo hay ahí... No entremos en cosas de casados mejor.