Álvaro Escobar cumplió un año lejos del tabaco, lo que equivale a 10.980 cigarrillos y un ahorro de más de un millón y medio de pesos. Para coronarlo, recibió su título de periodista.
Para qué estamos con cosas: el coronavirus, además de generar angustia, ha reducido milagrosamente el trecho que hay entre la cama y el refrigerador. ¡Pobres pantalones! Pero la comida no ha sido la única vía de escape por el maldito bicho: el cigarro también ha hecho lo suyo, y dejarlo en medio de la pandemia es un logro.
Ya, el caso de Álvaro Escobar no es nuevo. Tampoco pasó al inicio de la crisis sanitaria. ¿Entonces? Fue hace justo un año, pero mantenerse hoy libre de nicotina es un mérito mayor. "Creo que estaba haciendo una de las galas finales de Rojo. Al final, el día perfecto para hacerlo es el que tú decides", dijo a La Cuarta.
El actor y comunicador compartió la noticia en Twitter, donde también contó otro secreto. "Yo uso una aplicación para apoyarme en lo del cigarro, es como un coach, se llama Quit Genius y me va avisando los logros. Así, llegué a 365 días. Me llegó también el certificado de título de periodista. Pensé 'qué bonito, son muchas cosas para festejar, prendamos un pucho', jajajá", bromeó Alvarito.
- ¿Qué cambios has tenido?
De un día para otro, nunca más tosí, no sentí ahogos, que se los atribuía a la alergia. Tampoco volví a usar un inhalador. Las encías empezaron a tomar un color más parecido al que uno tenía al nacer. Tengo más energía y no recuerdo haberme resfriado.
- Un cambio completo...
La aplicación muestra cómo van sanando tus órganos, los días de vida que recuperas...
- ¿Cómo dijooo?
Dejé de fumar 10.980 cigarrillos, y ya recuperé 38 días de vida. Incluso, me dice que ahora bajé en un 20 por ciento las posibilidades de tener un accidente cerebrovascular.
- ¡Ufff! ¿Y el bolsillo?
En un año ahorré un millón 647 mil pesos. Si calculas dos cajetillas diarias, se llega a eso. Yo lo hacía, son 40 cigarros nomás, y si trabajas 18 horas por jornada... Y claro, había mucho de hábito también. Fumé treinta años, partí en la Escuela de Derecho, pero antes era deportista.
- ¿Y subiste de peso?
Nooo, me he mantenido. Es que volví a la actividad física, uso la trotadora, ya no la ocupo para colgar la ropa, jajajá.
- ¿Y te tentaste?
Fue duro, pero pasa. Hoy pienso que no hay nada mejor que llenar los pulmones de aire fresco. Hay que masticar estos logros. Mi hija fue clave, le prometí que dejaría el cigarro.
- Llegó el título de periodista...
Sí, cierra un periodo de esfuerzo, por la complejidad de la carrera y las circunstancias. Usaba los minutos que me sobraban para estudiar. Y es una señal de respeto hacia quienes se habían titulado, porque, sin ser periodista, trabajé en eso.