Pasó de animar "Rojo" al Festival de Olmué. Ya trabaja en su vestuario para marcar la diferencia entre el programa juvenil y el evento musical, donde quiere verse cómodo y acorde a la edad que tiene.
"No estaba en mis planes, nunca me lo propuse", transparenta Álvaro Escobar al ser designado como animador del Festival de Olmué, que se extenderá desde el 16 al 19 de enero. Para el actor y conductor de "Rojo" fue una tremenda sorpresa recibir la propuesta de TVN, luego de que Cristián Sánchez dejara vacante ese rol, que venía haciendo desde 2018 en compañía de Karen Doggenweiler.
"Si me lo piden, lo hago, no tengo problema", dice Escobar entusiasmado con este debut en las lides de los festivales masivos y televisados, uno de los pocos que se decidió realizar, en medio del estallido social. "Tengo la curiosidad de entender cómo será este festival en el contexto y circunstancias actuales, porque todos somos parte de un proceso y la TV como medio de comunicación no está exenta. Las artes y la cultura tienen un lugar muy especial en este gran proceso", dicta.
- El Festival de Olmué, Las Condes y el de Viña son los únicos que tendremos en pantalla este verano...
Sí, y es curioso porque las artes son parte del proceso y es ahí donde uno ha encontrado símbolos tan potentes, como las canciones El derecho a vivir en paz (Víctor Jara) y El baile de los que sobran (Los Prisioneros) en momentos del proceso. Ha estado muy golpeado para los trabajadores del arte, han sido meses muy complicados, hay una contradicción.
- ¿Qué crees que pasará?
Es un festival con tradición, familiar, eso me gusta mucho, pero hay que ver cómo estará el público. Todas las noches son muy distintas en programación. - ¿Tienes pensando el clóset para el Patagual? Estoy defendiendo mi derecho a salir con chalas, ojotas, jajajá. En mi caso trabajaré con quien me tocó hacerlo en 2010, en TVN, cuando se me asignó un primer programa (Divididos), hablo de Sergio Arias (diseñador favorito de Felipe Camiroaga). He conversado con él y sabe traducir el espíritu de lo que uno quiere.
El espíritu del show
"Yo le pedí que quería lucir de la edad que tengo. No tengo canas, no hay caso con eso, y eso que tengo 53 años. Entonces, lo que no he podido lucir en canas, me gustaría traducirlo en el vestuario... Que este traduzca la edad que tengo. Quiero estar en el escenario con propiedad, me quiero sentir cómodo y aunque parezca más joven, porque Rojo contribuye mucho a ver a alguien más enérgico", comentó el animador.
- ¿Cuánta edad cree la gente que tienes?
Por lo general me echan 45 y acabo de cumplir 53 años. Entonces, en el escenario quiero proyectar exactamente el momento en la vida en el que me encuentro.