"Estamos hasta el cuello", se lamentó la ex chica reality sobre la compleja situación que atraviesa en medio de la pandemia. Realizó fuerte llamado a las autoridades.
Sin duda, la crisis sanitaria está golpeando fuerte a trabajadores. Y más todavía a las pequeñas Pymes. De hecho, nadie queda ajeno a este realidad, tanto así que la propia Angélica Sepúlveda sufre en carne propia los efectos la pandemia.
Todo esto, al complejo momento que atraviesa su emprendimiento de repartición de frutas y verduras que tiene en Yungay.
Además, se ha visto complicada por no obtener los recursos para mantener a flote su emprendimiento. Incluso, hace algunos días le llegó una orden de embargo, tal como lo informó en sus redes sociales.
"Hu... que pasan en Chile. Hoy fui al banco a pedir un préstamo para nuestro taller de confección y arriendo de disfraces que está parado desde febrero por el COVID-19, ¿y saben qué me dijeron? Que no cumplo con los requisitos", lanzó de entrada en el cibermundo.
Por otro lado, explicó que el pasado viernes recibió una orden de embargo por una deuda de dos millones de pesos, la cual fue dejada en su antejardín.
"La tremenda sorpresita que tiró hoy a las 14:25 horas en el jardín de mi casa, el simpático receptor Roberto Santander Hernández. Comprenderán que nada podía hacer a esa hora un día viernes, de lo contrario, habría ido corriendo al Banco Estado a pagar todito".
La furia de Angélica Sepúlveda
"Con deudas millonarias por todos lados y no porque seamos botarate (irresponsables con el dinero). Todas las pymes informales e independientes pedimos créditos para lograr nuestros negocios, tenemos ese anhelo y gusto por el trabajo incansable y lo hacemos con amor y dedicación", agregó.
Sin embargo, Angélica no dudó en reclamar que las autoridades: "no empatizan de verdad con la clase media, con los que estamos hasta el cuello con cuotas vencidas, amenazados con embargos, etc., terminando la pandemia va a quedar la patá y al igual que miles de chilenos, saldré a la calle a exigir".
Y sobre la misma, agregó: "¿Nos piden que nos quedemos en casa para perderlo todo? ¡Pues yo no los banco más! y aunque sea vendiendo droga junto esa cagá de plata, pero escuchen bien, a mí no me embargan ni una hu... ¡Lo dije y qué!".
Temas Relacionados
