La favorita del reality aseguró sentirse débil e impotente ante la prueba.
En menos de una semana, Michelle Carvalho se ha convertido en una de las grandes figuras de Gran Hermano 2, donde el público le está otorgando su apoyo en redes sociales.
No obstante, en el capítulo de este martes se mostró el lado más sensible de la influencer. Tras la prueba por el Liderazgo, que fue ganada por Carlyn Romero, la brasileña no pudo contener las lágrimas debido a su performance.
Y es que en la primera etapa de la competencia, los participantes debían atravesar una red que estaba apegada al suelo, una situación que se volvió muy compleja para Carvalho.
“Me da un poco de pena, me siento débil y me sentía muy inútil cuando mis compañeras me trataban de ayudar”, dijo entre lágrimas a Emilia Daiber, que presentaba la competencia.
“O sea, mi debilidad es caminar sobre las cuatro patas. De hecho, en mi historial de los otros realities siempre perdía haciendo eso. Entonces me da mucha impotencia”, agregó.
Pese al apoyo que la comunicadora le brindó y las felicitaciones por participar, Michelle reconoció que “Quizás ahora mi fuerte no sea la competencia, pero sé que puedo aportar, en muchas otras cosas, en la convivencia. Y seguir entrenando para dar lo mejor de mí las próximas veces”, agregó.
Tras recibir también el apoyo de sus compañeras, especialmente de Chama y Yuyuniz, Michelle se tomó con mejor humor lo ocurrido.
“Sabes qué me da risa, que en mi presentación yo dije ‘soy buena competidora’. Me van a hacer memes los hueones. ‘Soy una excelente competidora’, y la hueona arrastrada como una morsa en la red”, cerró.