A pesar del obstáculo que vivió durante su rutina en el Festival de Viña del Mar 2017, el comediante salió victorioso y se llevó a casa las gaviotas de plata y oro.
Era 2017 y la primera vez que Rodrigo Villegas, quien se presentará de nuevo esta noche, se subía al escenario del Festival de Viña. El público disfrutaba su rutina, no obstante, cuando iba por la mitad empezaron a sonar las temidas pifias y gritos que decían “¡fuera!”. El humorista se puso nervioso y, en un intento por calmar al Monstruo, empezó a animar al público, diciéndoles que hicieran una ola y que se sacaran una selfie.
Pero poco sabía que las pifias no eran por él. Rafael Araneda tuvo que parar su espectáculo para explicarle lo que estaba pasando: “Hay un problema arriba de seguridad, pero nada que tenga relación con usted. A usted la gente lo está escuchando, lo está respetando”, le dijo, mientras la audiencia comenzaba a aplaudir, afirmando lo que decía el animador.
El altercado durante la rutina de Rodrigo Villegas
Los gritos que pedían que se fuera no eran para Villegas, sino para una persona que estaba en estado de ebriedad y provocando incidentes en el sector alto de la Quinta Vergara.
El hombre, según contaron los testigos que estaban en el lugar, estaba molestando a un vendedor de café y después a la prensa y los asistentes del festival, mientras que otros decían que había estado intentado robar pertenencias del público.
Fue entonces que carabineros entró al sector para llevarse a la persona en cuestión y también a otras que se unieron a la riña, para así devolver la calma a los espectadores, pero también al humorista, quien miraba sorprendido desde el escenario, intentando entender lo que estaba sucediendo.
“Hasta que esto se solucione nosotros estamos aquí, queremos que hagas tu rutina tranquilo, como corresponde”, le aseguró Araneda. “Ningún problema”, respondió Villegas. El público igual intentó animarlo, y a pesar de que no había terminado su espectáculo, comenzó a pedir gaviota para el comediante y a cantar “Rodrigo” en unísono.
A pesar del mal rato, el comediante, con su gran espíritu humorístico, aprovechó el momento para improvisar una broma que despertó aún más los aplausos de la audiencia, lo que dio el paso para que continuara su rutina y, después, recibir sus merecidas gaviotas de plata y oro.
Revisa aquí la rutina de Rodrigo Villegas en el Festival de Viña 2017
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