Las bandas de pop surcoreano BTS, Seventeen, Kard y SHINee son solo algunas de las que han llenado sin parar los principales escenarios de nuestro país. De paso se instaló un fenómeno que va mucho más allá de lo musical y que supera a cualquier otra moda.
El K-Pop se consolidó en Chile por el año 2012, cuando la banda JYJ fue la primera que viajó desde su natal Corea del Sur hasta Santiago.
Hoy en día el movimiento se masificó y suena en las principales radios del país, por eso no es extraño que grupos como BTS se den el privilegio de llenar dos conciertos en el Movistar Arena, incluso vendiendo las entradas del primero en menos de dos horas.
En televisión, hace semanas el matinal "Bienvenidos" de Canal 13 se sumó a la moda, haciendo un concurso de grupos de baile de este estilo.
Y es tal el arrastre de la iniciativa, que varios miembros del panel se han contagiado y tirado sus pasos, como ocurrió con el chino Yuhui Lee (ex "MasterChef") y la actriz Josefina Montané, quien el viernes, y a modo de despedida de su reemplazo en la animación a Tonka Tomicic, realizó una aplaudida coreografía acorde al género musical.
El ex chico "Yingo", Rodrigo Gallina, fue pionero en descubrir el potencial del género, cuando durante el 2014 decide crear el programa radial "K-Pop For Me". Un espacio de lunes a viernes, que en dos horas de transmisión aborda el pop coreano como única temática.
"Yo estaba un día cualquiera en un programa radial normal, y comencé a darme cuenta de que la gente pedía canciones de grupos que yo al menos no tenía idea quiénes eran. Fue algo de nunca acabar, comencé a tocarlas una y otra vez, lo que trajo una masa de gente brutal", recordó.
Para Rodrigo el éxito del estilo es atribuible a varias razones, por ejemplo, que sus siete u ocho integrantes sean todos guapos, además de que bailan y cantan a la perfección. "Esto no queda chico al lado de nada norteamericano, está al nivel de un Justin Bieber o de Selena Gomez", analizó Gallina.
Por otra parte, la experta en comportamiento humano y estudiosa de conductas juveniles Guillermina Guzmán, entiende esta adopción de la cultura coreana por los chilenos como algo lógico de acuerdo a los tiempos que vivimos.
"Los jóvenes van escudriñando en internet y logran una cierta identidad con esta cultura, se generan clanes finalmente", comentó la especialista. "Los padres no deben asustarse con estas modas. Si no rompen los prejuicios finalmente terminan alejando a sus hijos", agregó.
Fanáticos
Repartidos en diferentes fans club de Facebook como Army y SHINee Chile, que en su conjunto albergan más de 70 mil seguidores, los fanáticos nacionales del K-Pop se han hecho notar en el mundo por pernoctar hasta cinco días antes en las afueras de los conciertos.
Es tan potente el movimiento que incluso el diario norteamericano The New York Times destacó que la productora local NoiX, que trae a este tipo de bandas, "no hacen promoción de sus shows y de todas formas venden todo en solo horas".
Susana Correa (20), staff de la Organización SHINee Chile, baila y canta al ritmo coreano hace siete años. Correa le atribuye el éxito de la tendencia entre los jóvenes chilenos al tipo de letras que emplean sus canciones, con una mezcla de coreano e inglés son letras que reflejan experiencias de vida.
"Son temas que te llegan por las diferentes situaciones de las que hablan. Cuando busco las traducciones siempre son un tremendo palo para mí", completó Susana.
Expansión
Lo que comenzó con tres grupos de fans bailando en las afueras del Centro Cultural Gabriela Mistral, se ha transformado en multitudinarias convocatorias que cada fin de semana llenan de fanáticos el Parque San Borja.
"Se hacen concursos de karaoke, baile y hasta trivias para ganar entradas a los conciertos, lo que atrae a nuevos seguidores", señaló la joven.
Catalina Aburto (17) vive en la comuna de Pudahuel, y es parte de los nuevos miembros de la comunidad de este ritmo en Chile.
"Además de llamarme la atención la música y el baile, me encantó que todo sea colorido y extravagante. Los artistas ocupan el pelo teñido, no tienen problema en combinar una gran variedad de colores llamativos", aclaró mientras preparaba una actividad con su grupo de amigas en el San Borja.
Lejos de sonar solo para algunos, el estilo coreano se ha extendido más que en años anteriores. No solo se trata de música, sino que también de la forma de vestir, comer y hasta de hablar.
"Ha comenzado a sonar en Radio Disney, Carolina y otras tantas más, ya no es solo el grupo coreano, ahora es cómo los grupos coreanos conquistan a la gente", finalizó Rodrigo Gallina.