La princesa del pop relató en su recién lanzado libro “La mujer que soy”, una impactante anécdota que vivió con una amiga: “Estábamos tan abiertas espiritualmente y tan heridas. Nos mostró que había más de lo que podíamos ver”, contó.
El esperado libro de Britney Spears “La mujer que soy”, ya está en librerías chilenas y se espera que se aun éxito rotundo en ventas. En el texto, la cantante abrió su corazón y contó todo lo que ha guardado estos años.
Una de las revelaciones que publicó fue lo que vivió cuando terminó su relación con Justin Timberlake, la intérprete dijo que una vez sintió algo de otro mundo mientras conducía por el desierto de Arizona.
En su libro lo describe como Dios, un poder superior o una experiencia paranormal que se apoderó de ella mientras aceleraba en un convertible con una amiga, en un viaje para recuperarse mentalmente de su aborto y de la ruptura con su ex.
“Nos mostró que había más de lo que podíamos ver”
Britney dijo que terminar con el también cantante la hizo sentir como si estuviera bajo una maldición y por eso emprendió un viaje junto a su amiga, quien también había terminado con el mejor amigo de Justin más o menos al mismo tiempo.
La princesa del pop afirmó que el cielo de Arizona estaba lleno de estrellas y que conducían con la capota abajo y el viento soplándoles en el pelo cuando “una sensación espeluznante se apoderó de ella”, describiéndola más tarde como “una belleza profunda y de otro mundo”.
Spears pensó en preguntarle a su amiga si creía en los extraterrestres, pero no lo hizo, solo “se quedó callada y sentada durante un largo tiempo”, hasta que s compañera de viaje le preguntó: ¿Sientes eso? ¿Qué es eso?”
La diva de la música dijo que “lo sintieron porque lo necesitaban. Estábamos tan abiertas espiritualmente y tan heridas. Nos mostró que había más de lo que podíamos ver”.
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