El cineasta había recibido decenas de miles de dólares para crear una serie para Netflix, pero usó la plata para invertir en criptomonedas, comprar autos de lujo e inclusive pagarle a los abogados de su divorcio.
Carl Rinsch, director de la película 47 Ronin protagonizada por Keanu Reeves, fue arrestado e imputado por fraude electrónico y lavado de dinero.
Según consta en The Washington Post, la fiscalía del Distrito Sur de Nueva York acusa a Rinsch de gastar casi $11 millones, destinados a un proyecto televisivo, en criptomonedas y autos de lujo.
A grandes rasgos, el caso ocurrió luego de que Netflix le pagó $44 millones por la serie de ciencia ficción White Horse, pero tras la firma del contrato, Rinsch empezó a comportarse de manera errática.
La plataforma le otorgó $11 millones adicionales, que el director habría desviado a cuentas personales. En ese escenario, Rinsch perdió más de la mitad en inversiones, pero ganó millones en criptomonedas en 2021.
También se acusa que gastó cerca de $10 millones en cinco Rolls-Royces, un Ferrari y otros lujos, además de un millón en abogados, incluidos los de su divorcio.
Netflix obtuvo en mayo una indemnización de $8.8 millones y el control del metraje del proyecto inacabado. Rinsch, arrestado en West Hollywood, enfrenta hasta 20 años de prisión si es hallado culpable.