Durante los últimos días, apareció que los principales casos de bullying se dan entre los alumnos de terceros medios. Y en esa onda, los diferentes canales hablaron largo y tendido sobre el tema, tal como ocurrió este jueves en "La Mañana de Chilevisión".    

De hecho, fue en ese contexto que Carola de Moras sacó la voz y se refirió a una delicada situación que vivió durante su época escolar en Santiago, a donde llegó a estudiar proveniente de Osorno.

Según la animadora del matinal, una compañera se encargó de hacerle la vida de cuadritos desde el día uno que llegó al establecimiento educacional. "Es heavy como uno queda marcado, uno piensa que como adulto lo supera. Yo tenía una compañera de curso que era insoportable conmigo. Insoportable. Y uno piensa que perdona, pero todos tenemos yayitas muy fuerte que tenemos en el colegio", comenzó su relato.

"A mí me hizo pebre. Yo en la gira de estudio me devolví antes. Me tenían hasta acá. Me aburrí. Dejé a mis compañeros de curso y le pedí a mi papá que por favor me devolviera. Lo pasé súper mal", agregó la partner del Rafa Araneda sobre su gira de estudios.

Además, la Carola dejó contó que ser tan cercana a los varones del curso hacía que una de sus compañeras la tuviera entre ceja y ceja. "Me hacía la vida imposible. Me hice amiga de muchos hombres y eso empezó a molestar. Era como la guapita que llegaba del sur, buena para el deporte, presidenta de curso, aunque no era matea porque me iba pésimo. Y esta líder negativa empieza a atraer a otras", confesó.

Feo, feo

Sin embargo, al rato Carola de Moras retomó el tema de su gira de estudios y reveló detalles de las feas situaciones que le tocó vivir. "Me pasó que lo empecé a pasar súper mal. Mi ropa interior aparecía colgada en la ventana. Y cuando tienes 14 años eso te da lata. Tenía una cámara fotográfica preciosa que era de mi abuelo. Me la rompieron, me sacaron los rollos. Esa cámara me dolió y ya no quería estar más allá", explicó.

Eso sí, todo llegó a su fin cuando empezó con sus pitutos. "Llegó un momento que empecé a trabajar en la moda y empecé a faltar harto al colegio. Disfruba no yendo al colegio. Porque me pasaba que en los recreos me quedaba sola porque esta galla se dedicaba a aislarme. Cuando salimos de cuarto medio lo que más feliz me hacía era no tener que ver más a esta persona", remató.