La Rancherita y su equipo sufrieron un grave percance mientras grababan un video clip en la parte más alta del Cajón del Maipo. Se les quedó la camioneta enterrada en la nieve y estuvieron más de cuatro horas a la merced del frío.
La montaña en cualquier momento cambia, y puede transformarse de un paisaje hermoso a una trampa mortal. Eso fue exactamente lo que le pasó a Carolina Molina, la "Rancherita", cuando el miércoles se encontraba grabando cerca de los Baños Morales.
"Estábamos en la filmación de Lejos de mi vida, mi nuevo video. Como siempre quiero mostrar un poco de mi país y estaba en Chile, aprovechamos de ir a la nieve, pero nunca pensé que nos iba a pasar algo tan fuerte".
- ¿Qué te pasó?
- Estábamos en el Cajón del Maipo grabando, llevábamos como el 90 por ciento del video y de pronto se nos cortaron las cadenas de la van en la que estábamos. Fuimos súper preparados, con todas las medidas de seguridad, pero uno nunca puede controlar del todo a la naturaleza.
- ¿La pasaste muy mal?
- Es que el tema de las cadenas hizo que se nos enterrara la camioneta y no podíamos salir. Al principio era todo risas y sin mayores preocupaciones, pero cuando ya habían pasado cuatro horas y el combustible se comenzó a acabar fue que nos preocupamos, porque sin bencina se apaga todo y nos quedaríamos sin calefacción.
- ¿Llegaron a ese punto?
- Sí, incluso pensé que podría haber muerto de hipotermia. Cayó la noche y sin calefacción la cosa se puso negra. Por suerte fuimos con un instructor de montaña el que fue muy aperrado, porque decidió bajar a un pueblo que está cerca de donde nos habíamos quedado enterrados. Eso sí que nos preocupamos, porque se fue a pie y se demoró como dos horas y media en volver. Ahí yo ya estaba muy preocupada e incluso con el equipo nos habíamos comenzado a desesperar.
- Todo resultó bien, finalmente...
- Por suerte, sí. Francis, como se llama el instructor, llegó con unas camionetas y nos sacó. Pudimos calentarnos de nuevo.
- ¿Y el video?
- Tengo que darle las gracias a mi equipo de grabación, ellos fueron muy profesionales y decidieron que si yo podía termináramos el video. Y así fue, una vez que tomé color, me maquillé y terminamos las últimas escenas.
- ¿Algo que recapacitar?
- Que siempre hay que ir bien preparados. Después que logramos grabar bien, nos mandamos feroz asado arriba en agradecimiento a los que nos rescataron.