Con plata de su bolsillo y su camión de la solidaridad, recorre distintas comunas dándole alegría y música a la gente, a cambio de alimentos no perecibles para donar a las ollas comunes que tanto lo necesitan.
Veinte años en la música, un paso por Televisa, específicamente en Guadalajara, y domador de animales de más de 500 kilos. Ese es el currículo de Vicente "Charro" Morales, un duro en el industria musical, que en las últimas semanas se ha dedicado a mostrar su lado más amable: el solidario.
En su "camión de la alegría y la esperanza" salió en ayuda de los más necesitados y lo ha hecho con las rancheras, su gran pasión.
En el "charromóvil" recorre San Fernando, Las Cabras, Nancagua y San Vicente de Tagua Tagua, con la misión de entregar un poco de música y alegría a la gente a cambio de alimentos no perecibles para ayudar a las distintas ollas comunes de la zona.
- ¿Cómo se le ocurrió? Fue a mi mujer a la que se le ocurrió la idea, pues usted sabe. Todo comenzó para el Día de la Madre. Nosotros antes regalábamos saludos, pero como no se podía por todo el tema del coronavirus, decidimos tomar el camión e ir cantando.
- ¿Y cómo llegó a las ollas comunes? Después lo hicimos para el Día del Padre, y el día viernes, antes de que los celebráramos, me llamaron de una olla común de Nancagua, para ver si le podríamos ayudar con un balón de gas.
- ¿Ahí se le prendió la ampolleta? ¡Claro! Y yo les pregunté '¿qué más necesitan?' y me dijeron que un poquito de comida, pues andaban escasos.
- Fluyó toíto... Entonces, celebrando el Día del Padre nos fuimos con la frase "que los aplausos se transformen en comida no perecible".
- ¿Y cómo les fue? Ahí logramos reunir una tonelada de comida. Y de ahí comenzó en mi región la coordinación con distintas ollas comunes.
- ¡Qué buena, oiga! Lo lindo, es que ya hemos logrado más de 10 toneladas de comida.