Montserrat y Matías tardaron 6 horas en realizar el proyecto que mostraron en el Lego Fun Fest.
Más de seis horas dedicados a ubicar cuidadosamente cada pieza de Lego pasaron los pololos Montserrat Monasterio y Matías Pineda, quienes recrearon así una de las primeras fotos que se tomaron juntos para presentarla en el Lego Fun Fest.
Asumidos como fanáticos de Lego, estos ingenieros industriales cuentan que en la versión anterior del encuentro quedaron cautivados por la Galería de Arte, por lo que tras comenzar a pololear decidieron algo para participar en esta ocasión.
- ¿Cómo surge esta idea y qué fue lo más difícil?
"La idea del retrato salió a modo de celebración de nuestros 6 meses de pololeo, que aprovechamos de celebrar en el Lego Fun Fest. Fue difícil por el tema del tiempo y el cansancio, lo de hacer la fila varias veces, mantener la concentración sin tirar la toalla a mitad de camino. Afortunadamente fuimos capaces de trabajar juntos con determinación hasta el final y quedamos muy felices con el resultado", relata Matías.
A romperla en el Lego Fun Fest
Montserrat, en tanto, añade que "fuimos el año pasado y descubrimos la Galería de Arte al final del evento y no nos alcanzó mucho el tiempo. Nos enteramos que este año volvía el Lego Fun Fest y dijimos:" ¡Tenemos que romperla!".
Además, Montserrat señala que durante el año estuvieron buscando alguna idea para concretar en el festival pero que nada cumplía con sus expectativas. "Buscamos imágenes en internet de distintas cosas y de repente se nos ocurrió que podríamos inmortalizar nuestra relación en un retrato. Fuimos a eso al evento, eso era lo que queríamos lograr ya que la vez pasada lo pasamos demasiado bien y teníamos ganas de repetirlo"
- ¿Cuánto se demoraron en hacer el retrato?
"Fueron cerca de seis horas las que estuvimos ahí en el Lego Fun Fest; empezamos a las dos de la tarde y terminamos a las ocho. Lo complicado era que cada 10 minutos teníamos que salir del juego para darles la oportunidad a otros y teníamos que volver a hacer la fila", recuerda Monserrat.
Para Matías, por su parte, "el factor tiempo es importante, nosotros teníamos una guía pensada con tiempo. Llevarlo a cabo no es tan difícil. Yo buscaba rápidamente las piezas y ella iba armando. Es agotador pero lo pasamos muy bien"
La pareja cuenta que finalmente utilizaron 3.840 piezas de Lego distribuidas cuidadosamente en un retrato de 48x80 bloques. Míralo a continuación.
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