El exfutbolista vivió una profunda conversación son su polola en el reality Tierra Brava que terminó con un final inesperado.
En el capítulo de ayer domingo 18 de febrero del reality de Canal 13, Tierra Brava, se pudo ver como el participante Nicolás Solabarrieta se sinceró con su polola Guarén sobre un diagnóstico médico desconocido.
La flamante nueva pareja del momento mantuvo una conversación íntima con su pareja en la cual “Nico” comentó sobre su vida alejado del fútbol profesional.
“Este último tiempo he estado muy carretero, saliendo mucho, porque empecé los 20 a los 26. Toda mi vida antes me lo pasé viajando, tratando de jugar, buscando clubes, y cuando me retiré, en mayo, me di cuenta de que podía hacer todo eso”, contó Solabarrieta, según detalla Publimetro.
Un tumor cancerígeno
Además, siguió explicando que le descubrieron un tumor en el momento en que decidió dejar el fútbol:
“Cuando me encontraron el tumor nunca le tomé el peso, estaba más preocupado de cuándo me iba a recuperar para volver a trotar en la trotadora. Por el momento estoy bien, me tengo que chequear cada 6 meses... puede volver, pero espero que no”, confesó.
Sobre los motivos del tumor, y consultado por su pareja, Solabarrieta sostuvo que: “Para mí el cáncer es una enfermedad de la emoción. Creo que la emoción que más me afectaba en ese momento todavía está, pero aprendí a vivir con eso”.
Final inesperado
Mientras se mantenía la seria conversación entre la joven pareja, esta se vio interrumpida por un inesperado burro que les robó la almohada en que estaban apoyados.
“Es bizarra esta h… ¿Qué hace un burro con una almohada?”, comentó entre risas Nicolás Solabarrieta.
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