Hace unos días, Maura Rivera sorprendió a sus seguidores al revelar que su familia junto a Mark González estaban en pleno proceso de mudanza.

La ex integrante de Rojo compartió un video mostrando el que fue su hogar completamente desnudo y todas sus cosas en cajas, listos para la mudanza. Asimismo, señaló que su familia se iba a Viña del Mar antes de partir a una nueva aventura.

Tras varios días de incertidumbre, Maura compartió un video en sus historias en donde aclaró algunas de las consultas que ha recibido y entregó algunos detalles sobre el gran cambio que estaba viviendo su familia.

“No nos vinimos a vivir a Viña, estamos de paso por Viña nada más. Esta es nuestra casa también, por lo tanto trajimos muchas cosas de nuestra casa en Santiago a Viña. Estamos en periodo de desembalaje, que es muchísimo, he estado súper ocupada en eso”, explicó Maura, agregando que mucha gente le ha escrito pero que no ha tenido tiempo para responder.

En esa misma línea, aclaró que “los animales, tanto perros como gatos, siempre me los traigo conmigo donde sea. Si yo me voy a vivir a China, me los voy a llevar como sea. Son parte de mi familia, no son muebles, por lo tanto para mi tienen la misma importancia que mi familia”.

“Lo otro es que tenemos planes laborales, personales, familiares, los cuales nos hicieron tomar la decisión de irnos de Santiago, de nuestra casa. Ya les contaré, hasta que esto esté 100% concreto”, aseguró Maura.

“Se cerró un ciclo”

Asimismo, la bailarina indicó que con su familia “estamos súper bien, contentos, dando un paso súper importante, con el apoyo de toda nuestra familia y de nuestros amigos que saben”.

Maura entonces aclaró otra de las consultas que ha recibido por parte de sus seguidores con respecto a la escolaridad de sus dos hijos. “Es parte del proceso, no se van a quedar sin colegio. Por el contrario, eso es prioridad para mí”, aseguró.

“Estamos bien, cansados, muy agotados (...) ya de a poquito les voy a ir contando”, afirmó.

La ex Rojo entonces confesó con respecto a la mudanza que “dejar la casa en la que viví casi 12 años es triste, es nostálgico, pasaron muchas cosas ahí, muchos recuerdos, formamos un hogar. Fue súper nostálgico, pero se cerró un ciclo, y cuando uno cierra un ciclo se abre otro mucho más lindo, más grande, más bonito. Por eso tuvimos algunas despedidas, pero estamos dando un paso muy importante”.

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