A diferencia de lo que siempre se ha dicho, que "Farandulandia" comenzó con el mechoneo de la gemela a la modelo Titi Ahubert, Daniella contó que su primer acto sensacionalista fue reconocer su implante mamario.
Era marzo del '97. En Concepción se disputaba el cetro para ser Miss Hawaiian Tropic y en medio de las concursantes, una bella Daniella Campos sorprendía a todos en traje de baño. Los comentarios apuntaron a que la gemela se había operado para impresionar al jurado, algo que ella confirmó meses más tarde en "Viva el Lunes", de Canal 13.
"En ese tiempo eran temas tabú las cirugías estéticas, todas se las hacían, pero lo negaban, y yo fui súper honesta, conté la verdad, siendo súper chica, tenía 21 años", dijo sobre la historia, que es considerado el primer símbolo de la existencia de la "Farandulandia" criolla.
Campos recordó que le preguntaron si se había hecho una cirugía, y "yo conté el aumento mamario, quedó la embarrada. Obviamente me lo hice porque iba a competir en el Hawaiian Tropic Internacional y era parte de mi trabajo estar lo mejor posible, pero creo que fue tema por envidia de otras concursantes, cuando ganas siempre intentan cualquier cosa para tirarte para abajo".
Daniella cuenta que "era súper segura de mí, al año siguiente estuve en el Miss Chile y también dijeron que estaba arreglado, yo recuerdo que dije 'a mi nadie me gana en traje de baño', tenía todo claro y estaba 100 por ciento preparada para competir internacionalmente, hasta el día de hoy mantengo el récord en el Hawaiian Tropic Internacional, porque el sexto lugar del mundo es lo más alto que hizo una chilena. Al año siguiente fui Miss América, fui cuarta en el mundo, conseguí los mejores lugares de Chile en la historia, sin contar a Cecilia Bolocco, que fue Miss Universo".
Para la votación de Miss Chile, Daniella recibió más de un millón de votos, es decir, casi el 10 por ciento de la población de ese entonces puso todas sus fichas en Campos, logrando una expectación que no se veía desde la Bolocco. "Yo me jugué mi carrera. Cuando le gané a Venezuela y salí Miss América, el organizador de allá se fue indignado y ella llorando a mares, porque si perdía su carrera se acababa. Lo que pasaba en los concursos era muy fuerte", señaló.
Amor farandulero
Tras los éxitos, vino su bullada relación con Iván Zamorano y el famoso mechoneo con Titi Ahubert y otros episodios faranduleros, que deja en el baúl. "Siempre fue visionaria. Yo me quería enfocar en lo mío que era el modelaje, y ahí representaba todo lo que quería el concurso. Si volviera atrás haría todo de la misma forma, hasta mejor, lo que hice fue tremendo, es cosa de ver los resultados".
Es más, asegura que "después de mí, la gente dejó de ocultar las cirugías, sirvió para transparentar lo que hoy sucede, no hay persona en televisión que no tenga una cirugía, antes no se podía hablar del tema, que hubiese una apertura de mente fue por lo que yo provoque", se cachiporreó.
Pero Daniella no sólo se dedicó a concursar. sino que también buscó chicas para que fueran como ella en el Miss Mundo, desclasificando algunos mitos. "Hicimos una empresa donde trabajamos con los mejores profesionales de nuestro país, mantuvimos un nivel top, que era lo que le faltaba al concurso, cuando lo dejamos se fue a pique. Teníamos cirujanos, odontólogos, profesionales de primera, piensa que le cortábamos un frenillo de la encía a las chicas para que en la sonrisa se vieran más los dientes, hicimos algo realmente profesional, sabían protocolo, nutrición, era importante ser Miss Chile, ahora no es así", dice orgullosa de lo cosechado.