Aunque estudió un año de francés y otro de ingeniería en alimentos, en su anuario de cuarto medio el actor confesó su verdadera pasión. Un amor previo al teatro y la actuación.
Álvaro Rudolphy Fontaine nació en Viña del Mar el año 1964, pero fue criado en Concepción, donde su familia vivió hasta la separación de sus padres.
Ese hecho cambiaría su formación escolar, la que vio gran parte realizada en la Alianza Francesa penquista.
Fue cuando el actor regresó a su ciudad natal, junto a su madre y sus dos hermanos, para terminar el colegio en los Sagrados Corazones de Valparaíso.
"Es uno de nuestros egresados más jóvenes: 16 años, que no los representa en absoluto", se lee en el anuario de 1980 cuando Rudolphy salía de cuarto medio.
"De figura alta y desgarbada, 'pinta de mateo' y un aire distraído, Álvaro es un joven virtuoso y de talento que llegó con nosotros a Primero Medio y que, poco a poco, nos convenció que posee un espíritu digno de sus capacidades intelectuales", dice la reseña escolar.
Luego sigue :"Sus inquietudes abarcan los campos más diversos: lo hemos visto a cargo de la iluminación de un acto cultural, de vice-presidente de El Vocero, como integrantes de la Banda y nos enteramos que como hobby practica karate y batería".
Según sus compañeros de colegio, "nos ha convencido con su palabra criteriosa que hemos escuchado en jornadas y clases y ha sabido identificarse con sus compañeros y amigos".
La pasión de Rudolphy
"¿Saben qué desea estudiar como carrera?", pregunta retórico el texto del anuario.
"Música, como intérprete en batería. Bien por la música misma que se gana un muchacho íntegro y cabal", responde.
Lo cierto es que Álvaro Rudolphy estudió un año de francés y otro de ingeniería en alimentos en la Universidad Católica de Valparaíso.
Finalmente optó por el teatro, área a la que se había acercado desde la enseñanza media.
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