El cantante también se emocionó al recordar a su madre y padre, quienes lo tuvieron a los 16 y 21 años, respectivamente.
Anoche, en un nuevo capítulo del programa de Canal 13, De tú a tú, Martín Cárcamo viajó a Miami para conversar con Douglas, intérprete de canciones como “Cariño malo”.
Allí, el cantante triunfador en Viña del Mar desclasificó momentos de su infancia y contó algunas infidencias.
¿Por qué tomaron la decisión de irse a vivir a Miami, donde residen hace más de cinco años? El cantante contó que siempre había conversado con Ana Sol de vivir en esta ciudad cuando estuvieran mayores, sin embargo, el estilo de vida más relajado y de vida de barrio, los cautivó antes de lo presupuestado.
Además, agregó que una de sus hijas, Julieta, dibuja animaciones desde los 11 años y uno de sus sueños es trabajar en aquello. Según Douglas, en Chile este oficio no está muy desarrollado, por lo que esto también sumó para pensar en vivir en Miami.
“Para mí lo más importante en la vida, es que ellas sean felices”, agregó el cantante.
“Hacíamos magia”
Junto a Martín Cárcamo, Douglas hizo memoria de su nacimiento, cuando su madre tenía 16 y su padre 21 años. Por ser sus padres tan jóvenes siempre tuvo una relación cercana y de amistad con ellos.
Eran tiempos en que compartían un departamento con sus abuelos en San Miguel, “nosotros vivíamos en un departamento pequeño de dos habitaciones, donde en una habitación dormían mis abuelos y en la otra habitación, en una cama dormía mi papá y mi mamá y, en la otra cama, mi hermano y yo”, recordó el intérprete.
“Recuerdo que hacíamos magia, hacer magia es entrar con una sonrisa al almacén de la esquina sin ningún peso en los bolsillos y salir caminando con un octavo de mortadela, un kilo de pan y una margarina, eso es magia”, recordó con una sonrisa en el rostro.
Fueron momentos difíciles, pero recalcó que los niños no sienten la necesidad, “cuando no tienes nada, todo está bien, entonces yo aprendí de muy pequeño a disfrutar de las cosas simples de la vida y a tener recuerdos maravillosos”.
“Mi papá y mi mamá se postergaron toda la vida por nosotros y eso es algo que yo, en vida, se los voy a agradecer, porque me dieron las cosas más lindas en la vida y los extraño muchísimo; esta pandemia ha sido muy dura porque me los ha quitado, eso es muy duro”, reflexionó con la voz quebrada por la emoción.
Fue cuando Martín le mostró un saludo enviado por su madre, quien recordó momentos de la infancia del cantante.
El intérprete se mostró como un eterno agradecido de sus padres, por la opción de ellos de tenerlo, “soy un agradecido de mis papás, de lo que ellos enfrentaron, cómo asumieron una responsabilidad conmigo… decidieron tenerme, mi mamá cortó su juventud”.
“Hubo que apechugar, no más”
Además, reflexionó sobre la paternidad, “uno como padre hace la mejor pega que uno puede, el amor que uno siente por los hijos es infinito… y yo fui padre muy joven”.
Douglas al igual que su progenitor, fue papá muy joven, a los 19 años, de su hija Nicol y confesó que fue terrible contárselo a sus padres porque él y su hermano fueron padres con pocos meses de diferencia, “a mi papá le llegaron los dos misiles”, recordó riendo.
“Hubo que apechugar, no más, además era una época distinta… para nosotros ir a la universidad era impensado, era una cosa impagable”, agregó que en esos tiempos no sabía qué hacer, porque le gustaba la música y era buen alumno.
En relación a su padre, comentó que le dolió saber que él iba a ser papá, pues él era el hijo responsable, “el que nunca fallaba, jamás hice la cimarra”. Sin embargo, lo terminó apoyando en todo.
El cantante, relató que durante el día trabaja de guardia en una tienda deportiva y en la noche estudiaba, luego fue vendedor, después cajero y finalmente jefe de tienda.