El ex tenista había presentado una querella en contra del fotógrafo por perjudicar su imagen pública. Esto por unos dichos que emitió en un programa web.
Marcelo Ríos y Jordi Castell han protagonizado varios round en el último tiempo. Cada vez que pueden, ambos se sacan los trapillos al sol o se tiran pesadeces en redes sociales.
Eso sí, una sus tantos conflictos fue más allá de un roce cibernético y gatilló que el ex número tenista presentara una querella en octubre pasado contra el animador, a quien acusó de perjudicar su imagen público.
En la acción judicial, el Chino apuntó con el dedo al ex Primer Plano por sus declaraciones en el programa Carpool VAC, que se emite a través de YouTube.
En la instancia, el también fotógrafo sostuvo: “si yo te cuento lo que hace en South Beach cada vez que va a visitar a un travesti que es dealer de crystal meth, en South Beach, en Washington Avenue… (...) y si les cuento que tengo cómo comprobar eso (....) y si les cuento la razón por la que su hija, su hija mayor, la que tuvo con Giuliana Sotela, la Constanza, estuvo enojada con él un año y medio porque se metió a su teléfono, por equivocación, se metió al teléfono de su papá, y encontró cosas que tenían mucho que ver con ehhhh mujeres que no eran mujeres”.
Y este miércoles, se llevó a cabo una audiencia donde las partes lograron un acuerdo extrajudicial, en el que Castell debe retractarse públicamente de sus palabras y admitir que se trataron de su acusaciones falsas, y que jamás tuvo pruebas. De hecho, ese desmentido debe hacerse con la misma publicidad que tuvieron los dichos que originaron la querella y para ello se elegirá un medio de comunicación digital”, según revela La Tercera.
Además, Jordi se comprometió de forma inédita a no referirse en el futuro al ex número uno del tenis, ni tampoco a otros integrantes de su familia. Incluso, si eso llega a ocurrir quedó estipulado por escrito que deberá pagar 5 millones de pesos. Esto, como una especie de multa.
“Estamos muy conformes con el acuerdo que se alcanzó. Nuestra intención era que el señor Jordi Castell reconociera públicamente que las acusaciones que realizó en contra de Marcelo Ríos eran falsas y este objetivo se logró”, reveló Eugenio Merino, abogado del Chino.
De esta forma, Castell evitó que el julio siguiera adelante, con el cual arriesgabauna pena de tres años de cárcel y el pago de 15 UTM.