En un nuevo capítulo de su podcast, los conductores analizaron la medida que la creadora de videos aplica con sus seres queridos.
“¿Eres tóxica?”, le preguntó Daniel Fuenzalida a Rosario Bravo. “Tengo cosas tóxicas”, le admitió la tiktokera, quien luego graficó su situación.
En un nuevo capítulo de su podcast ¿Cómo están los weones?, contó que “tenemos un acuerdo con ‘Carlitos’, que en realidad es por seguridad: tenemos GPS con toda la familia, ‘Carlitos’ sabe dónde estoy yo en este minuto y yo sé dónde está él”.
La creadora de videos y enfermera hacía alusión a su matrimonio con el cardiólogo Carlos Caorsi, con quien tiene un pequeño hijo de cuatro años.
“¿Quién lo adoptó en la famila?”, le preguntó “Exhuevo” en alusión a aquel acuerdo. “Yo”, contestó ella, “con consentimiento de todos”.
¿GPS por seguridad?
“Entonces tú eres la tóxica”, lanzó el animador de Ahora Caigo. “¿A quién le pueden poner GPS? Eso no es muy sano”, planteó él, mientras ella le contestó que “no tengo nada que esconder”. Acto seguido, revisó que su marido andaba en la Clínica de Las Condes, laburando.
“Es que si no hay nada qué esconder, ¿para qué vamos a andar con GPS?”, se preguntó él. “Es seguridad”, insistió ella, quien también reveló que tienen la misma clave de teléfono, ya que, según argumentó ella, eventualmente lo podrían llamar por alguna urgencia y él no está con el celular a mano, por ejemplo, en la ducha.
A través de su cuenta de Instagram, Rosario comentó sus declaraciones para, fuera de la talla, aclarar que dicha medida “no es de tóxica”, porque “¡son medidas de seguridad familiar!”. Y remato con humor: “Cada una con sus métodos”.
Por supuesto, la medida generó debate entre sus seguidores, apareciendo dos posturas principales, con algunos matices.
Por un lado, estaban quienes vía redes sociales defendieron el método de Rosario, aunque principalmente cuando se trata de hijos: “Tan extraño es para todos que no se tenga una ubicación de tu gente?”, “¡Te encuentro toda la razón!” y “En estos tiempos, por seguridad, es lo mas seguro”. En tanto, el otro bando se mostró contrario: “Lo encuentro muy invasivo”, “Ese comportamiento no es sano y, aunque traten de justificarlo, es totalmente de alguien que necesita controlar todo” y “yo de las cosas malas prefiero enterarme a la antigua no más: si pasa algo me llamarán”, fueron algunos de los comentarios de los cibernautas.
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