La modelo habló sobre la polémica con Daniela López, quien la acusó de pagarle el arriendo y de destruir su hogar, lo que Camila negó.
Camila Recabarren se sinceró durante una conversación con la revista Sarah, en donde volvió a abordar la polémica funa que realizó en su contra la chilena Daniela López cuando estaba en Estados Unidos.
Tras toda la polémica que se armó, Camila regresó a Chile hace unas semanas y conversó con la revista, revelando cómo conoció a la chilena durante su paso por el país norteamericano.
“Cuando llegué a California fui al Consulado, le pregunté al cónsul si tenía algún dato de un lugar barato como para poder arrendar, y así llegué a ella. Es una artesana súper seca. Me recibió con los brazos abiertos”, comenzó relatando.
En esa misma línea, agregó que “fue bacán. Y después de eso, al final, la verdad no sé qué le pasó. No entiendo cómo actuó. Estuve en ese departamento dos meses y todo bien”.
Asimismo, aseguró que “estoy agradecida de su buena onda. Ella al final tuvo un mal momento, y eso es tema de ella. Yo no le respondí nada sobre sus declaraciones, porque todo lo que se estaba diciendo era falso. Había tenido discusiones con un chico antes, y con otra persona antes de él, entonces yo era una más…”.
“Fuimos súper respetuosas”
Con respecto a las graves acusaciones que realizó López en su contra, Camila aseguró que “todo es mentira. Mi familia y yo sabemos cómo fueron las cosas, y no voy a caer en esto de responderle públicamente nada. Soy una persona con valores, vengo de una familia honesta y trabajadora. Soy deportista, ¡jamás sería drogadicta!”.
Camila entonces aseguró que sí pagó el arriendo que le debía y que antes de irse del lugar, dejó el departamento limpio. Sin embargo, acusó a López de tener un problema con su hija, Isabella.
“Ella (la dueña del departamento) tenía algo con mi hija. Siempre me estaba diciendo “la Isabella ensució esto”, “la Isabella hizo esto otro”, pero fuimos súper respetuosas, la verdad. Mi hija me pedía que no respondiera a nada, ella tiene nueve años, entiende y vio todo lo que pasó. Tenía que comportarme para darle tranquilidad”, confesó Camila.
Finalmente, sobre el día de abandonó el departamento, la modelo reveló que “fue terrible. Ella encerró a mi hija. La Isabella lloró mucho, lo pasé súper mal. No nos dejaba salir del departamento. Tuvieron que venir otros chilenos a rescatarnos…”.