Actor chileno se sinceró y reveló un desconocido antecedente personal en medio de una entrevista.
Revuelo generó a mediados del año pasado el quiebre amoroso entre Benjamín Vicuña y China Suárez. De eso momento ya pasaron sus buenos meses y harta agua corrió bajo el puente.
Así nomás, pues mientras la actriz estuvo en el ojo del huracán por sus encuentros cercanos con Mauri Icardi en el llamado WandaGate, posteriormente se emparejó con el empresario español Armando Mena Navareño.
El galán chileno, por su parte, también se dio una nueva oportunidad en el amor con Eli Sulichin, joven de 32 años y amiga de Pampita, su ex, ex novia.
Y a pesar de que no suele ahondar públicamente en su vida privada, el Benja se desahogó y habló de todo en una entrevista con Germán Paoliski, al otro lado de la “cordishera”.
“Hay que bancar la soledad. A mí me cuesta estar solo”, acotó el conductor de Telefé. Acto seguido, Vicuña se sinceró.
Las confesiones de Vicuña
“Es difícil estar solo. Hay gente que tiene otra predisposición a la soledad. A mí me gusta la gente, la familia y la casa llena”, respondió.
Y ene sa misma línea, agregó dio luces también de cómo lo está pasando en su actual relación: “la pareja es una forma de vivir. Hoy estoy feliz. Viviendo un momento bonito”.
Por último, también se dio un minuto para analizar su quiebre con la China.
“Por supuesto que todos perdemos con una separación. Lo tengo clarísimo, y lo sé como hijo de padres separados. A veces hay que tomar una decisión difícil por los niños o por la felicidad de los adultos. O por la paz”, remató.