La conductora de Hoy se habla (TVN) conversó con Martín Cárcamo para De tú a tú (Canal) y abordó sus dos divorcios.
Margot Kahl se sinceró sobre sus dos separaciones matrimoniales en una íntima conversación con Martín Cárcamo para De tú a tú (Canal 13).
La histórica animadora del Buenos días a todos (TVN), que ya tiene 62 años, se casó cuando tenía 24, siendo la conductora del noticiero del canal público. En ese tiempo tuvo a su primer hijo: “Le daba papa a las 12, (mediodía) iba volando al canal y volvía a mi casa a las 3 (de la tarde) para la siguiente papa”.
“Estaba corriendo todo el rato”, aseguró quien regresó a la tele a mediados del 2022. “Hoy me pregunto cómo lo hice”.
Su primer matrimonio se quebró en 1994, cuando ya se encontraba en la conducción del matinal junto a Jorge Hevia: “No tuve nunca amigos famosos, salvo Jorge”, reveló. “Es una gran persona, muy cercano, un gran apoyo”.
Aquel primer quiebre amoroso “fue desgarrador, lo más doloroso que a uno le puede pasar en la vida”, declaró. “Fueron minutos difíciles en mi vida, separarse con tres niños y trabajando en un matinal era muy exigente, y yo estaba muy mal”. Es más, “muchas veces me largaba a llorar de la nada, y era secar lágrimas, masajito en la espalda y para adentro de vuelta al estudio 4 horas diarias”, desclasificó.
De hecho, cuando al programa iban expertos en separaciones y el impacto que estas tenían para los hijos, ella no aguantaba: .“Yo no los podía hacer, los tenía que hacer Jorge”, admitió. “Muchas veces de la nada me daba un nudo en la garganta, y era pena, pena, pena”. Es decir, “viví ahí el pleno proceso previo y de después”, remarcó. “Fueron hartos meses de dolor”.
Sus dos mayores dolores
Sin embargo, todo ese dolor siempre procuró mantenerlo en silencio: “Nada de mí se ha hecho público nunca”, aseguró, al punto que “tuve que dar una entrevista cuando me iba a casar con Víctor (Ossa, su segundo marido), porque nadie sabía que estaba separada”.
“Yo creo que la vida privada es privada, nunca he estado de acuerdo en ventilarla públicamente”, explicó. “Uno puede mantener la vida privada si quiere”.
Su segundo matrimonio fue en 1997, el cual le dio Cata, su cuarta hija y única mujer. Eso sí, aquella unión también acabó en divorcio: “Es durísimo”, remarco, a pesar de que “la segunda vez es con mucha madurez, mucho más pensado”.
“Y que te suceda la vida y te pase por encima de nuevo es muy doloroso, especialmente para mis niños”, cerró. “Tuve una enorme sensación de fracaso, fue el proyecto más importante de mi vida”. El episodio se emite este domingo 30 de julio.
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