Ya se ha empezado a grabar la teleserie de la tarde que sustituirá a Verdades Ocultas. El actor y comediante tendrá el principal junto a Luz Valdivieso.
Tras su protagónico en la serie 42 días de oscuridad (Netflix), basada el el oscuro caso de Viviana Haeger, Daniel Alcaíno, tendrá un nuevo papel central, pero ahora en la teleserie de Mega que recibirá la postal de Verdades ocultas: se trata de Hasta encontrarte.
Este nuevo melodrama también tendrá entre sus protagonistas a Luz Valdivieso, Coca Guazzini y César Sepúlveda, secundados por nombres como Lorena Capetillo, Juan Carlos Maldonado, Francisco Ossa, Alejandro Trejo y Álvaro Morales
La historia trata sobre Catalina Cienfuegos (Valdivieso), una joven proveniente de una familia conservadora, quien a los 18 años pierde trágicamente a su hija Emilia durante el parto. Esto tuvo un impacto en su vida, y su relación con el padre de la pequeña, Lautaro Cáceres (Daniel Alcaíno) estudiante de pedagogía y a quien los conservadores padres de su novia rechazan.
Varios años después, este pololeo ya ha quedado atrás y ambos han rearmada sus vidas por separado. Sin embargo, el el pasado le saltará en la cara cuando sepan que la retoña, en realidad, está vivita y coleando.
“No soy el galán de la teleserie”, contó Alcaino en conversación con Wiken. Sobre su papel, explicó que “‘Lautaro’ es un hombre con una convicción tan fuerte, que lo convierte en un héroe, como muchos héroes anónimos”.
Junto, con ello, quien también fuera parte de Los 80 (Canal 13), plantea que a su personaje “le negaron la existencia de esta hija y él tiene que volver y abrirse paso, como Ulises, que tiene que cruzar toda adversidad hasta llegar a Ítaca”, haciendo referencia a La Odisea de Homero.
Dicho eso, analizó que “Lautaro” resulta “que es un héroe, y no un galán que va enamorando a una y a otra”, considerando que ya hay actores que acostumbran a hacer este tipo de papel, y mencionó a Benjamín Vicuña, Gonzalo Valenzuela, Fernando Kliche, Pancho Reyes y Jorge Zabaleta.
“Creo que la Quena (Rencoret) me eligió a mí por otras cosas”, agregó.
El prejuicio contra el melodrama
Respecto a la dinámica de grabar en teleseries relata: “Aquí no está la calma de poder estudiar la escena, ensayarla, la quietud del lente que la analiza”, porque “son 30 escenas diarias, pasas de un cambio de ropa a otro”. Por lo tanto, reconoce, “también adquiere una verdad muy natural”.
En esa línea, reflexiono que “no hay que sobreactuar, no hay que hacer ninguna mueca especial, solo ser verdadero”. Por ejemplo, “verdadero en el amor, al mirar, al decir: ‘Te quiero’”. Eso lo vuelve “un desafío, porque aquí no estoy disfrazado detrás de lentes amarillos ni de una morisqueta”.
“Hay un prejuicio de que las teleseries tienen que ser livianitas, tontonas”, agrega sobre los melodramas. “Esta teleserie es un tema profundo, doloroso, político, pero también con los elementos de un buen culebrón”.
Luego, llevó la ficción a su propia vida: “En mi caso personal, como muchas parejas, también he sufrido perdidas”, por lo que “hay que respetar ese duelo en sus diferentes casos, porque es diferente perder una guagüita a los tres meses que a los ocho, o perderla después de nacer”.
Por último, remató: “Creo que con esta teleserie vamos a interpretar el sentir de mucha gente y hablar de estos temas que también son políticos, porque se trata de algo que pasó en Chile y en Argentina durante la dictadura”.