Jessy es el nombre de la luchadora nacional que partió como cheerleader y ahora está ad portas de ingresar a la escuela de desarrollo de la marca más importante de wrestling a nivel mundial.
Seguidores en todas partes del mundo, millones de dólares en ganancias y espectáculos en estadios repletos. La WWE lleva años liderando el negocio de la lucha libre a nivel mundial pero siempre está viendo en cómo ampliar su dominio y los planes a futuro pueden tener a una chilena entre sus protagonistas.
Se trata de Jessy, luchadora nacional de 19 años que ultima detalles para firmar contrato con la WWE, específicamente con la oficina de desarrollo de la compañía, en un hito que la convetiría en la primera sudamericana en llegar a las "grandes ligas" y la más joven en poner la firma. Un anhelo que, pese a su juventud, nació hace bastante tiempo.
A luchar porque se rompió la Barbie
Al repasar la historia de la santiaguina con el wrestling, bien se puede atribuir el primer acercamiento al azar.
"Yo era nada con la lucha libre, pero se me echó a perder un juego de PlayStation de Barbie y encontré un donde aparecía Trish Stratus (famosa luchadora de principios del 2000). Ella era como una Barbie, así que ahí la busqué en internet y le dije a mi papá que me gustaba eso", contó la luchadora en entrevista con el programa Suplex.
Allí comenzó un camino desde los 13 años y que tuvo diferentes profesores que desmenuzan su capacidad.
"Ella llegó a RRL (Revolución Lucha Libre) a los 14 años y se le veía un gran potencial porque antes había sido cheerleader. Hoy es un orgullo que pueda tener esa chance", comentó Coyote, uno de sus formadores y que la describe como una luchadora "ágil y que puede potenciarse en la lucha aerea".
El camino la fue llevando a distintos centros para perfeccionarse y hoy es en Yeyos Dojo donde sigue puliendo su técnica. "Jessy ha sido siempre muy detallista. Revisa cada movida paso a paso para poder mejorar y eso la puede llevar lejos en el wrestling", indicó Guanchulo, su entrenador en la actualidad.
Un camino largo
Fue a fines de 2018 cuando WWE aprovechó su última visita a Chile para hacer su "Tryout" prueba para ver potenciales talentos para la compañía y donde Jessy recibió largos elogios.
"Hace años pensar en que WWE se fijaría en Chile era impensado. Hoy eso está más cerca y el ingreso de Jessy puede marcar el camino", reflexionó Coyote, algo en lo que Guanchulo coincidió.
"La empresa está mirando hacia este lado del mundo y Chile es atractivo. Tal como hicieron en Japón, están buscando personajes, pero al entrar recién empieza el proceso de un camino muy largo", remató el luchador.
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