De 2016 un grupo compuesto por 14 familias de Paine está en disputa legal con Fabricio Vasconcellos por la compra de una parte de los derechos que el ex Mekano poseía en un terreno de esa comuna, que los compradores desconocían era de uso agrícola y estaba en una lote inundable.
La estafa, de la que alegan ser víctimas las familias, alcanzaría a $238 millones, debido a que cada uno de los afectados pagó $17 millones al bailarín, quien le aseguró a los compradores la legalidad del negocio.
"En la audiencia él no se notaba preocupado, es una persona con dinero que sólo quiere ganarnos, ya tiene la plata en su bolsillo", contó Inés Díaz, una de las demandantes.
En la citación de ayer, el juez de la causa determinó que no estaban las pruebas suficientes y que no se logró notificar a todos los involucrados en la estafa, por lo tanto, la audiencia fue aplazada para el 13 de septiembre.
Tras conocerse la determinación del juez, Fabricio se retiró del recinto sin entregar declaraciones, mientras su abogada y vocera, Paola Cabezas, explicó: "La causa lleva dos años en una investigación desformalizada, y esperábamos comenzar en esta audiencia a limpiar el nombre de Fabricio Almeida".