Tras ocho temporadas como protagonista de "The Walking Dead", el actor Andrew Lincoln anunció esta semana que la novena será la última que contará con su participación como el policía Rick Grimes.
Esta noticia causó gran impacto entre los fanáticos de la serie, debido a que ésta comienza con Rick despertando del coma en un hospital, en un mundo rodeado de " muertos caminantes".
A la salida de Lincoln se sumaría la de su colega, la actriz Lauren Cohan, quien encarna a Maggie Greene, uno de los roles femeninos más potentes del show, y que ha ganado presencia en las últimas temporadas.
La partida de ambos miembros del elenco, que llevan gran parte del hilo argumental de la ficción, ha avivado los rumores de que la serie de AMC estaría en plena agonía. E incluso, algunos fanáticos pronosticaron en redes sociales que le pondrían la lápida en la décima temporada.
Porque a estos anuncios se le suma la brusca caída en el rating que ha tenido la serie durante sus últimas temporadas, llegando a niveles alarmantes para el exigente mundo de la televisión estadounidense.
Pese a este apocalíptico panorama, la producción de este programa aún espera revertir el bajón, y entre las medidas que se adoptarían está el darle mayor relevancia al personaje de Darryl Dixon (Norman Reedus), uno de los preferidos por los fans de "The Walking Dead".
Salfate se suma al clamor
"Creo que con la partida de Rick Grimes lo más sensato que le podría pasar a esta serie es que, al igual que a los zombies, le den un disparo en la cabeza", dijo Juan Andrés Salfate, un reconocido admirador del género de los muertos vivientes.
"Es una serie que lleva más de ocho años al aire y que, para algunos, su encanto residía precisamente en que no es una serie sobre zombies, sino que habla de lo que es el ser humano en condiciones extremas", agregó.
Salfate considera que, tras la partida del protagonista, mantener la serie en pie "es estirar el chicle. Lo más justo para todos, incluyendo a los fans, es darle un digno final".
Trágicas muertes
Lori Grimes
La muerte de Lori, esposa de Rick, hizo sufrir a los fanáticos. La mujer falleció al dar a luz y su propio hijo Carl debió dispararle en la cabeza para evitar su transformación en zombie.
Andrea
Era una de las mujeres fuertes de la serie, pero se enamoró del hombre equivocado y pagó caro su error. Fue El Gobernador quien causó su muerte, dejándola encerrada con un zombie que la mordió.
Beth Greene
La hermana menor de Maggie falleció cuando estaba a punto de escapar del hospital donde estaba prisionera, cuando atacó a la cruel oficial que daba las órdenes en el recinto.
Glenn Rhee
Negan se tituló como el villano más malvado, al asesinar a Abraham y después a Glenn con su bate "Lucille" en frente de todos sus compañeros de grupo. El asiático era uno de los pocos sobrevivientes de la primera temporada.
Carl Grimes
La muerte del hijo y heredero de Rick Grimes, que fue mordido por ayudar a un desconocido, conmocionó a los fans de la serie, que no podían asimilar el trágico final de Carl.