El actor dejó atrás la vida capitalina para abrazar la magia del sur, trabajar en sus programas y la gastronomía. "Cuando recién partió esto estuve un poco deprimido y cocinar me ayuda mucho", dijo.
Cuando Felipe Braun (49) tomó la decisión de irse a vivir a Puerto Varas y "colgar" el traje de galán de teleseries, lo hizo sin mirar atrás. Su cambio de vida y ciudad lo tienen en el paraíso, pues al abrazar la magia del sur echó al olvido el estrés de la capital y las maratónicas jornadas de grabaciones a la que están sometidos los actores.
"Es un encuentro fascinante con la naturaleza, pero también con fuertes procesos de cambio", aseguró a La Cuarta.
Al iniciar su nueva vida en la Región de Los Lagos, y decirle adiós a las telecebollas, Felipe Braun desató un mar de lágrimas entre sus fans. Sin embargo, el perla no se alejó la tevé, ya que trabaja en una nueva temporada "Factor de cambio", programa de 13C, donde mostrará distintas iniciativas y soluciones en torno al cuidado del planeta.
"Estamos viendo muchos de los proyectos que aparecieron en temporadas anteriores y cómo se enfrentan a la pandemia. Es entretenido, porque la mayoría es gente visionaria y habla del cuidado y la salud hace mucho tiempo, sobre todo el cuidado de la naturaleza", dijo.
Otra faceta
Es sabido que en el sur se come bien. ¿Sí o no? Por lo mismo, el actor cayó paradito en la zona y hasta se ha dado el tiempo para desarrollar una de sus pasiones: la cocina.
"Tengo otro programa, en colaboración con Iansa, 'Lo dulce de estar juntos', que parte un poco por la necesidad de dar recetas cálidas y cariñosas en un momento difícil. Cuando recién partió esto estuve un poco deprimido y cocinar me ayuda mucho, así que empecé a compartir distintas recetas", sopló.
- Cuente la firme, ¿qué tal sus preparaciones? Hemos ido mejorando, partimos con recetas bien simplecitas. Como esto ha sido tan largo pasamos más tiempo en la cocina y, a veces, es bueno que alguien te diga cómo hacer algunas cosas, aunque sean sencillas.
- ¿Y le resulta el manjarsh? Aún no puedo hacerlo con leche de cabra, pero espero poder comenzar en una semana más. Eso es lo entretenido, poder hacer nuestro queso, nuestro manjar y quizás más adelante convertirlo en una Pyme.
- ¿La familia se acostumbra al cambio? Lo están pasando muy bien, pero los niños tambien sufren harto, al no poder ir al colegio y compartir. Las clases online también han sido agotadoras porque no es algo a lo que estamos acostumbrados. Nadie pensó que íbamos a necesitar tanto internet de un día para otro.
- ¿Cómo se llevan con los animalitos? Son muy cercanos, los quieren mucho y han aprendido harto. Hace poco nació una cabrita, la "Garuga", hija de la "Niebla". Y también han visto que otros se mueren, entonces saben cómo es la vida, la reproducción, el nacimiento y la muerte.