Florencia Araneda da detalle de angustiante momento que vivió en Aeropuerto de Estados Unidos: apuntó a revelador episodio

El pasado fin de semana, se estrenó la segunda temporada de Tenemos que hablar, podcast que se emite a través de Youtube y que es liderado por Marcela Vacarezza y Rafa Araneda, donde hablan de lo humano y lo divino junto al resto de los integrantes de la familia.

Durante la charla, se refieren a distintos temas y cuenta anécdotas vividas dentro del clan, y también algunas de carácter más personal. Por ejemplo, Florencia Araneda, la segunda hija del matrimonio, impactó al recordar un angustiante episodio que enfrentó en un aeropuerto de Estados Unidos, en uno reciente viaje que realizó desde Chile hasta dicho país.

Todo surgió cuando, en un momento de la conversación, todos debían responder a una pregunta al azar. En ese instante, Flo tuvo que recordar la última vez que había llorado.

“A veces no controlo mis emociones, soy llorona”, dijo de entrada. Luego, Rafael la echó al agua y reveló lo que había pasado en el terminal aéreo, lo que dio pie a que Flo contara algunos detalles de lo sucedido.

“Me voy a poner a llorar de nuevo, es que lo pasé pésimo. Es mi trauma ahora, fue atroz. Me trataron como una transportadora de drogas en el aeropuerto de Estados Unidos, fue la peor experiencia de mi vida. Pasaba como por ocho policías diferentes y todos sabían cómo me llamaba. Me abrían hasta las cremas, me revisaban todas las cajas, me decían ‘para qué es esto’”, relató la joven de 20 años, quien contó que pese a lo incómodo de la situación, se mantuvo fuerte y en ningún momento se mostró débil ante ellos.

Por lo mismo, ahora en diálogo con La Cuarta se explayó un poco más y expuso nuevos detalles de la inexplicable situación con la que tuvo que lidiar.

“Fue la peor experiencia de mi vida, firmado. No sé por qué pasó, yo igual voy harto a Estados Unidos, viví allá mucho tiempo y ahora que me vine a Chile igual voy harto a ver a mi familia y por el podcast también, entonces nunca había tenido ningún problema. Y fue primera vez que tengo un problema y yo no entendía nada, nunca me dieron una explicación puntual, solamente me decían que siguiera a una persona, la otra persona me estaba esperando y me decía ‘anda para allá’. Me revisaron todas mis pertenencias pero nadie me decía nada”, reveló en charla con el diario pop.

Luego, contó que “también los policías tienen esta como postura obviamente de superioridad que tampoco pueden dejar de lado, al final como para que uno los respete más, que es como tiene que ser, pero yo decía ‘no he hecho nada malo’ yo lo único que quería era llorar, llorar. No podía hablar con mis papás, que estaban afuera, no podía avisarles lo que estaba pasando, no entendía por qué era. Y de tanto ver series yo decía ‘me metieron algo en la maleta me voy presa’, ese era mi pensamiento en el minuto.

- ¿No te dijeron por qué tanto show?

- Nunca me dieron ninguna explicación, nunca me dijeron por qué. Creo que es porque el policía que me tocó para que revisara mi documento, no sé si o le caí mal o él andaba de mala, algo partió desde ahí, pero fue una experiencia traumática. Ahora voy de nuevo a ver a mi familia y cuando vaya a pasar Policía voy a estar tiritando. Lo pasé pésimo...

- Después pudiste llamar a Rafa igual...

- Cuando caché que me habían pasado un papel y que me dijeron ‘váyase usted para allá’, porque aparte me trataron súper mal a algunos, me quitaron el pasaporte. Yo estaba ahí parada y nadie me decía nada, entonces en ese rato yo sabía que una vez que me sacaran de ahí, yo sabía que no iba a poder hablar con nadie, no iba a poder tocar el teléfono, que tampoco donde estaba debería, pero dije bueno, era el minuto para mandar el mensaje rápido y decir ‘estoy teniendo un problema, me voy a demorar más’, porque si no sabía que iba a estar en plena revisión probablemente y me iba a estar llamando a mi papá. Iba a ser peor, entonces le mandé este mensaje rápido, pero no le pude decir nada más y fue bueno, ‘te aviso que pasa, me están llevando para otro lado’. Y ahí mi papá me mandaba mensajes sabiendo que solamente se los iba a poder contestar en el minuto que pudiera, pero no podía contestar, no podía revisar nada,

- Complicado...

- Tenía como a tres policías al frente mientras me revisaban una caja con cremas, entonces no podía contestar nada. Cuando salí le dije ‘ya salí, necesito ir al baño’. Me acuerdo que me fui al baño, me puse a llorar, como que toda esta angustia que tenía... porque yo no quería llorar al frente de ellos, entonces ahí me fui a llorar al baño. Los fui a saludar, veo a mi mamá y me puse a llorar de nuevo. O sea, fue puro llanterío al final. Estaba tan angustiada, pasé mucho susto. Aparte yo respeto demasiado la seguridad que tiene el aeropuerto de Estados Unidos, es muy potente todo, entonces yo en verdad tenía tanto susto que fue como cuando ya pude salir y vi a mis papás, tenía una angustia que pude dejar de lado. Fue como ‘ya, pasé, no pasó nada’. Me pasé las peores películas, así que por suerte no fue nada, no sé por qué fue, pero ojalá que nadie tenga que vivirlo.

- Oiga, y fuera de ese episodio... ¿Cómo ha sido esta experiencia de grabar este podcast familiar?

- La verdad yo no tengo nada que decir del podcast más que cosas positivas. Partió de una idea de mi papá y en el minuto todos lo encontramos media loca. La primera temporada fue muy de prueba, de ver cómo iba, de ver cómo la gente lo recibía y quedamos súper felices con los resultados, con cómo a la gente le gustó, lo mucho que se vio. Y ahora que tuvimos la posibilidad de hacer una segunda temporada y que la gente lo siga viendo también es una felicidad tremenda. Y felices nosotros que además gozamos hacerlo. Es un tiempo, al final, de pasar en familia juntos, de seguir conociendo cosas de nosotros y es una conversación... tal como la ven las personas, es como la vivimos nosotros.

- ¿Ha habido  algún tema en particular que te haya incomodado hablarlo...?

- Yo creo que ellos –Marcela y Rafa- saben perfecto los temas que yo llevo a redes sociales y los que no. Generalmente todo lo que es como mi vida privada, como amistades o relaciones o cosas así, a mí siempre me ha gustado mantenerlo un poco más afuera, y ellos saben que de esas cosas pueden dar ejemplos pero nunca tirar nombre. Y también en verdad como somos familia nos conocemos, sabemos cuáles son los temas que nos incomodarían, entonces no hay ningún tema que yo te diría como de ‘esto, por favor no lo hablen’, porque ellos también me conocen y saben lo que a mí me gustaría o no me gustaría que se hable.

- ¿Te cuesta mucho el tema de exponerse tanto...?

- No me molesta, creo que también desde que somos súper chicos la vida familiar y el ámbito familiar ha estado súper expuesto. Igual obviamente como familia uno elige qué mostrar y qué no, obviamente hay cosas que nunca se han sabido y que así se mantendrá, pero también generalmente con el público, con la gente como familia, recibimos puro cariño, entonces no es un ambiente donde nos sentimos incómodos al final como revelando nuestras cosas o contando cosas quizás un poco más íntimas de nosotros.