El video promocional de la serie "La Cacería: las niñas de Alto Hospicio" ha causado revuelo en televisión, pues se basa en la historia real que remeció Chile a fines de los '90 e inicio de los 2000, cuando desaparecieron 14 niñas en la comuna nortina a manos del psicópata Julio Pérez Silva.
Se trata de un thriller policial que verá la luz muy pronto por las pantallas de Mega, protagonizada por Francisco Melo, quien será César Rojas, detective que viaja de Santiago asignado al caso. Para ello deberá colaborar con un carabinero local, Carrasco (Gastón Salgado).
Uno de los casos más importantes que deberá seguir es el de Ayleen, interpretado por la actriz Giannina Fruttero (conocida por su papel de "Ramona" en la serie homónima de TVN), quien es la única sobreviviente a los ataques del maldito. "Mi personaje es una pieza clave, porque gracias a esta niña es que descubren al psicópata", cuenta Fruttero.
- ¿Cómo fue hacer una serie basada en hechos verídicos?
La historia tiene una base en hechos reales, pero está súper ficcionada también, hay harto que se fue creando a medida que fue avanzando el trabajo.
- ¿Tiene una carga interpretar a una víctima en un caso que conmocionó tanto al país?
Intentamos que no se viera en pantalla la historia de una joven, sin que también que se vea que a cualquiera le pudiera haber pasado, las abusaron y las asesinaron, no se fueron a prostituir como muchos pensaron. "La Cacería" es una reivindicación de las niñas de Alto Hospicio, porque a ellas las agarraron, las violaron y las asesinaron.
- ¿Eso cree la gente en el norte aún?
Allá hay varias opiniones diferentes, hay gente que cree que la persona que está presa no fue el psicópata, otros que creen que están involucrados los Carabineros, otros que no creen. Hay gente que decía que las niñas se habían prostituido en el norte, es curioso, porque uno pensaría que por estar ahí todo se iba a aclarar.
- Fuerte la historia.
Sí, porque no sólo se cuentan los hechos, también se quiere generar reacción con respecto a qué es lo que pasa en zonas más marginadas, qué pasa con las mujeres que viven ahí, si ya ser mujer es ser marginada en la historia, ser pobres, además, es peor. Se abren las preguntas de ¿habría sido igual si hubiera pasado en otra comuna? ¿Se habrían demorado tanto en encontrar un culpable?, es la discusión que se espera abrir.