Panelista de farándula reveló complejo momento tras declarar que “Chile es un país de mala raza”.
Carla Ballero estuvo en el centro de la polémica los últimos días, tras declarar que “Chile es un país de mala raza”, frase por la que debió ofrecer disculpas, pero este martes reveló que la declaración sigue teniendo consecuencias.
En el programa Sígueme de TV+, donde Ballero trabaja como panelista, estaban hablando de la situación de Maite Orsini, quien se encuentra hospitalizada por un delicado estado de salud, en medio de las polémica por las denuncias de violación contra Jorge Valdivia.
Ballero comentó que pese a que ha criticado públicamente algunas acciones de Orsini, considera que ahora es “pegarle en el suelo”, algo que no comparte, especialmente tras las críticas por sus dichos, contando que incluso han amenazado a sus hijos.
“Maite Orsini no era santa de mi devoción, pero por estupideces, nada importante. Hay gente que mucho tiempo me escribió odió por cómo hablábamos de Maite, qué se yo, si hablaba yo o no, pero me tuiteaban igual por el tema”, comenzó diciendo Ballero.
“Después de lo que me pasó a mí, de la estupidez que dije, me han amenazado de muerte hasta a mis hijos y todo, quiero decir que hay que tener tanto cuidado con lo que uno dice, tanto político como comunicadores, porque nadie merece la vuelta”, agregó.
Por último reflexionó que no criticará a Orsini en estos momentos, pero que cuando vuelva a su labor parlamentaria, será diferente probablemente.
“Los actos de uno hay que hacerse cargo y continuar, pero cuando alguien está en el piso, no hay que seguir dándole en el piso. Todo el resto como política cuando vuelva, será diferente”, cerró.