En el cuarto capítulo de la nueva temporada, el animador se trasladó hasta la Región de Los Lagos, donde conoció el drama de Lorenzo.
La nueva temporada de Lugares que hablan (Canal 13) ya estrenó su cuarto capítulo, para el cual Pancho Saavedra se traslado hasta la Región de Los Lagos, específicamente hasta "Camino Real", una ruta que en el pasado fue transitada por españoles y pueblos originarios en busca de abastecimiento.
En su recorrido, conoció a Lorenzo, una anciano que le relató una dura historia que había vivido hace un tiempo: fue estafado por su propio sobrino, quien vendió el terreno que le pertenecía.
Lorenzo no sabe leer ni escribir, por lo que dicha situación permitió al inescrupuloso pariente aprovecharse. La víctima recién se dio cuenta de lo que había sucedido cuando fue a pagar la luz, donde le informaron que el medidor ya no estaba a su nombre.
Según el relato, alguna vez Lorenzo le entregó una "carta de poder" a su hermano, quien, debido a la condición de Lorenzo, se convirtió en su representante legal.
Sin embargo, dicho delegado falleció, por lo que el poder quedó en dominio el sobrino en cuestión, quien habría realizado la posición efectiva del terreno para luego venderlo.
Indignado
En medio de esta historia, el animador Pancho Saavedra hizo ver su indignación:
—No le puedo creer, no le puedo creer... ¡Pero por qué la gente hace estas cosas, Dios mío! A veces la familia, más que el cariño, más que el corazón, ven en la otra persona un signo peso.
Pero es no era todo, porque Lorenzo temía ser echado del terreno donde vivía, en vista de que ya no era suyo.
Sin embargo, en el programa contactaron a la actual dueña, quien aseguró que ni ella ni sus hijos sacarían al hombre de ese lugar, permitiendo que viva ahí durante el resto de sus días.
Revive acá la historia
https://youtu.be/olG-VTpfkzs?t=1684
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