Los standuperos dejarán todo en el escenario del Teatro Cariola en su primer y único show en vivo como dupla. La cita es el viernes 31 de mayo en una presentación sin censura: “Estuve restringido durante cuántos años, acuérdate que yo era del canal del angelito y no se podía decir absolutamente nada”, le comentó el Profe Rossa a La Cuarta.
Iván Arenas desmenuzó los detalles de su espectáculo “Presos del humor” junto a Pelao Rodrigo, que se ha promocionado como un show sin censura: “Ocupamos la palabra huevada, no nos asustemos, hoy en día ya prácticamente no son garabatos, son expresiones del lenguaje”, reveló con su inmensa sabiduría a La Cuarta.
“No es para tanto, no llegamos a niveles de alta grosería. Pero es sin censura porque hay garabatos entremedio y son impuestos dentro de un chiste o una historia”, añadió apelando a su característico sentido del humor.
Con temas ligados a la contingencia y a la vida misma, ambos personajes de la comedia nacional prometen sacar carcajadas a los asistentes en una única fecha en vivo, luego de debutar con éxito como dupla hace unos años en plena cuarentena, vía videollamada.
“Esto es una gestión de amistad”
- Iván, ¿cómo nace este show? El primero en vivo con Pelao Rodrigo, porque ya hicieron uno online.
Sí, efectivamente, en la época de la pandemia. Que nos fue súper bien, bonito, pero después sacábamos cuenta de que era complicado porque no estás viendo a la gente, era sólo escuchar y estar contando chistes o anécdotas o curiosidades o historias; escuchando la risa del camarógrafo y el asistente, era como raro. Pero no creo haberlo vivido nosotros nomás, muchos hicieron shows en la época de la pandemia. Después de un tiempo, con Pelado Rodrigo, que somos amigos, empezamos a decir, “oye podríamos hacerlo, ¿Qué estás haciendo tú?, ¿Qué estoy haciendo yo?, ¿Por qué no nos unificamos?”. Esto es una gestión de amistad.
- Por lo que veo, le gusta harto el contacto con la gente.
O sea, yo creo que a quién no, los que nos subimos al escenario estamos pensando internamente de que toda esa gente que te fue a ver, nadie la obligó, te está ofreciendo el reconocimiento público porque te estima, porque te quiere, porque le gusta, porque quiere escucharte directo. Hay muchos que se me acercan y me dicen, “profe, yo lo veía en la tele, pero es mucho mejor ahora verlo en directo”, y es tierno, te entregan el cariño directamente.
“No llegamos a niveles de alta grosería”
- ¿Va a haber espacio para la improvisación, para hablar con el público, quizás?
Mira, yo no soy mucho de tener conversaciones con el público, pero sí lo integro en la medida de que constantemente les estoy diciendo que esto les tiene que haber pasado, que lo tomen en cuenta, que se aprendan esta parte, porque seguramente van a tener un amigo, un pariente, un vecino que es de esas características. Yo hago una oda a los huevones, y digo los diferentes tipos que hay a lo largo de Chile, cómo me estoy encontrando con ellos. Todos somos así, unos más, otros menos, cometemos errores, decimos cosas, por eso ocupamos la palabra huevada, no nos asustemos. Hoy en día ya prácticamente no son garabatos, en expresiones del lenguaje.
- Pero este es un show anunciado como sin censura…
En realidad, si bien es cierto, nosotros hemos anunciado con el Pelao Rodrigo un show sin censura, no es para tanto, no llegamos a niveles de alta grosería. Pero es sin censura porque, claro, hay garabatos entremedio y son impuestos dentro de un chiste o una historia.
- En otra entrevista hablábamos con Pelao que él está más restringido en la radio y que en los shows se libera, ¿usted también se sintió un tiempo así?
Claro que sí, Pelao se suelta mucho más. Yo también estuve restringido durante cuántos años, acuérdate que yo era del canal del angelito y no se podía decir absolutamente nada, cuando me desmandré fue en el programa de Eduardo Fuentes, Mentiras Verdadera, me pidieron que contara un chiste porque tampoco fui con la mentalidad de hacerlo, nace espontáneamente por una pregunta de Eduardo “¿Qué hacía yo en mi juventud?”, y yo contesté, “mira, yo hacía sketch”. Tenía una especie de grupo de teatro, sin ser ninguno de teatro, era para cooperar. Yo soy rancagüino, en aquella época en el liceo hacíamos cosas en el instituto, en los colegios, de repente hasta las monjas nos pedían para el aniversario. Hacíamos parodias, sketch y contábamos algunos chistes sanos. Y entonces Eduardo me dice, “cuéntate uno”, y le digo, “no, yo ahora no me sé ni uno de los blancos, tendría que ser sin censura”. Y me dice, “ya pues, son más de las once”. Como que me jodieron porque me pillaron en blanco.
- Pero salió adelante.
Salí adelante, claro.
“Tampoco llegamos al límite exagerado, teníamos un doble sentido”
- El show se llama “Presos del Humor”, y usted ha estado siempre trabajando en pos del humor, toda su carrera, ¿lo ve así?
Sí, incluso si uno analiza la época en que hice el Profesor Rosa, El Mundo del Profesor Rossa, La Mansión Rossa, siempre hubo un alto porcentaje de humor. Ya sea solo, con Don Carter, con Guru Guru, y Tío Valentín. Y había humor, bastante, indistintamente de que era un programa educativo, familiar, nosotros siempre colocábamos humor. Y después ya en Vía X, cuando hicimos La Mansión Rossa, le pusimos más picardía. Tampoco llegamos al límite exagerado, teníamos un doble sentido, la picardía a flor de labios, malas interpretaciones de lenguaje, ese tipo de cosas. Sobre todo Carter, se empezó a dar a conocer con esa característica y él también es así en vivo y en directo, siempre asociando la palabra, siempre juega con algo y lo tira y lo tergiversa y lo saca con un chiste, con algo que no puede ser.
- ¿Recuerda alguna anécdota?
Por ejemplo, en el programa explicaba la diferencia entre una tortuga acuática y una terrestre, y yo explicaba cómo una tenía la capacidad de guardar la cabeza y las patitas en su conchita. Y entonces él llamaba a la Conchita que era su señora, y le decía, “estoy con el profe Rossa, aprendiendo de la concha. Cómo uno guarda la cabeza y la mete”, “¿Cómo?” Le decía ella. “Pucha, me cortó la Conchita. Dijo que era un grosero”, respondía Carter. “Es que usted no le explica que estaba hablando de la tortuga, Don Carter”, le decía. Entonces todo era una mala interpretación, él es sin censura de verdad.
- ¡Don Carter ya se perfiló con su humor sin censura! Pero, volvamos al show, ¿cómo va a estar estructurado?
Con el Pelao nos ofrecieron hacer este show en Teatro Cariola y nos gustó la idea, no pretendemos ninguno de los dos hacer grandes escándalos, no, vamos a entrar al escenario con un bonito reconocimiento al público, un agradecimiento, vamos a hacer algo para que nos riamos y pasemos una tarde agradable, cada uno va a hacer su parte y al final nos vamos a juntar. Él sale, hace su monólogo y su stand-up, luego me llama, nos volvemos a saludar, nos deseamos suerte, hago lo mío y al final terminamos despidiendo a la gente, dándole el agradecimiento a quienes quisieron ir a divertirse un poco con nosotros, lo más simple del mundo. Mucha gente me preguntó dónde queda el Teatro Cariola, y es en San Diego 246, ahí vamos a estar esperándolos y desde antemano un agradecimiento y un abrazo grandote a todos quienes van a estar ahí presente.
Las entradas para el show “Presos del humor” en Teatro Cariola (San Diego 246) se encuentran disponibles a través de Ticketplus.