El periodista estrella de 31 Minutos recibió el premio que entrega la barra pop en la categoría de Personaje de ficción de la década. "Las ganancias las donaré a causas benéficas, como la asociación de huerfadrinos pusilánimes o la campaña contra el pirateo de fotocopias", aseguró.
Desde la sala de trofeos de 31 Minutos, su reportero estrella, Juan Carlos Bodoque, agradeció a la barra pop por elegirlo el Personaje de Ficción de la década en los Copihue de Oro.
"Envío este video desde nuestra sala de premios para agradecer a nuestro público, ciegamente fanático, y al diario La Cuarta, al que equivocadamente creía fenecido, por el premio Copihue de Oro 2021", señaló, con su verborrea habitual.
El conejo rojo que se hiciera célebre por su Nota Verde, en el programa, reveló lo que hará con el galardón. "Es para mí un honor sublime recibirlo, y en retribución a tanto cariño quería contarles que todo lo que obtenga por este galardón, absolutamente todo, lo invertiré en la próxima carrera de Tormenta China, mi yegua favorita".
¿Y si gana algo de dinero?¿lo apostará?, pamplinas. Bodoque aseguró que esta vez someterá a su insaciable gusto por las apuestas en la hípica, y destinará el dinero a campañas más provechosas. "Las ganancias las donaré a causas benéficas, como la asociación de huerfadrinos pusilánimes o la campaña contra el pirateo de fotocopias", aseguró.
Juan Carlos Bodoque, apostador, mujeriego y poeta ocasional, es una de las figuras del noticiario de ficción y uno de los cercanos al conductor, Tulio Triviño, a quien envidia en silencio. No oculta su aspiración a hacerse de la conducción del programa, merced a su labia y su estilo frontal que le ha hecho un nombre entre la audiencia.
Mientras espera el momento de conseguir el puesto principal en el noticiero, se mueve -a pie o en camioneta- como un reportero en terreno para grabar su Nota Verde, en que da cuenta de problemas medioambientales; cómo olvidar su célebre reportaje de La ruta de la caca, digno de un Pullitzer, o la historia del camping responsable, o el conmovedor reporte sobre la realidad los perros callejeros en la Vega central. Todos trabajados con su habitual agudeza -ya se la quisiera Matamala-, y sentido del espectáculo que lo volvieron el favorito de la gente.