El actor comentó el desgaste que le significó interpretar al terrible José Luis Echeñique en la teleserie nocturna de 2008. "Fue tremendamente agotador, pero a uno le gusta hacer ese tipo de personajes".
Entre mayo y septiembre de 2008, la teleserie nocturna El señor de la querencia fue un fenómeno, entre otras cosas por su historia, pero además por el sádico y cruel protagonista, el hacendado José Luis Echeñique, interpretado por el actor Julio Milostich.
Hace unos días, Milostich recordó el rol que le dio gran notoriedad en una conversación con el podcast Reyes del Drama, al que fue invitado junto a las actrices Bárbara Ruiz-Tagle y Alejandra Fosalba, quienes también fueron parte del elenco (interpretaron a Leontina y Mercedes, respectivamente). Entre otros detalles, reveló el agotamiento físico y mental que sufrió a causa de su trabajo interpretando al pérfido Echeñique.
"Paramos un tiempo, un par de semanas, porque la Quena (Rencoret, entonces directora del Área Dramática de TVN) se dio cuenta de que la cosa estaba muy bullente, entonces decidió parar un par de semanas -detalló Milostich-. Gracias a Dios teníamos una buena cantidad de escenas grabadas que podían salvarnos al aire".
"Entonces decidimos descansar, sobre todo yo. Avanzaron en otras escenas donde yo no estaba y yo me quedé dos semanitas tratando de recobrar un poco el aliento -añadió el magallánico-. Aún así no me las llevé peladas, aún así fue tremendamente agotador, pero a uno le gusta hacer ese tipo de personajes como actor, entonces es un poco sadomasoquista el asunto".
Milostich detalló cuales fueron, a su juicio, las claves del personaje: "Lo que pasa es que aquí pasaron hartas cosas, era una buena teleserie, era un tremendo personaje, era un elenco pequeño, era una tremenda dirección y era una tremenda producción. Cuando los astros están aspectados de esa manera, que debe pasar cada 15 años en una teleserie, a mí me tocó estar en ese lugar y lo aproveché al máximo".
"Terminó la teleserie y terminó el proceso, puede que hayan quedado resquicios del asunto, pero pasó el tiempo y ya se sanó. No quedé cojo ni tuerto",cerró.