La animadora de Invencibles, de Chilevisión, agrandó la familia con su nueva mini pig. El animalito es parte de la primera camada de esta raza en Chile.
El amor que Kika Silva siente por los animales es algo que nadie puede dudar. Sólo basta revisar sus redes sociales y ver la relación con Gin, el bulldog que le roba el corazón y que la acompaña a todos lados. A esto se le suma su fascinación por los cerditos, la que se inició el año 2017 cuando a su lado llegó Roxy, una chanchita que le regaló su ex compañero de labores Nacho Pop, justo para el día de su cumpleaños.
A pesar de que vivió con ella en su departamento, al tiempo tuvo que cambiarla de lugar para acomodarse a las crecientes necesidades de espacio de Roxy. Fue así que la llevó a una parcela, todo iba viento en popa, hasta que a través de su cuenta de Instagram la animadora anunció el lamentable fallecimiento del animalito, quien fuera atacado por un perro que entró al lugar donde residía.
A casi dos años de la lamentable pérdida de Roxy, este sábado la rubia le dio la bienvenida a una nueva integrante a su familia: Matilda. Hablamos de una mini pig, parte de la primera camada de estas mascotas en Chile, que le obsequió nuestro columnista y crítico de televisión, Vasco Moulian. "Con el Benja (su pololo) queríamos tener un cerdito en nuestra casa, y por esas casualidades me llama Vasco y me dice que tiene a Matilda, que si la quiero cuidar. Obvio aceptamos", contó Silva.
A diferencia de Roxy, este mini pig no necesita tantos cuidados especiales. "Es casi igual que un perrito, solamente tiene su comida especial", explicó Kika, es por esto que vive con ella en el depa, tiene su cama especial y se baña igual que un bebé, con agüita tibia y shampoo de guagua. Además se relaciona de lo mejor con su hermano perruno, Gin. "Ayer los vi jugando, igual llevamos pocos días, pero hasta el momento todo ha sido bien lindo. Estoy acostumbrando a ambos para que se puedan relacionar mejor. Aunque Gin se pone un poco celoso cuando estoy cerca de la Matilda, por eso evito estar cerca de ella cuando está Gin", continúa Kika.
- Todos conocimos la historia de Roxy, ¿no te da miedo pasar por lo mismo?
No, para nada. Con la Matilda todo es distinto, porque su raza es especial para estar en casa, es una mascota. En cambio la Roxy era una cerdita que necesitaba estar en su hábitat. Además, yo recuerdo a la Roxy con amor y felicidad, entonces no tengo ninguna pena, ni miedo.
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