“Me vi acabado”, reconoció el ex futbolista.
En su momento, Kike Acuña fue uno de los “chicos terribles” de la farándula nacional. Pese a brillar en la cancha en los inicios de su carrera, con el correr del tiempo los excesos le fueron pasando la cuenta.
De hecho, llegó un punto en el que hacía más noticia fuera que dentro de la cancha, y sus problemas con el alcohol se convirtieron en todo un tema, tanto así que económicamente también se vio sobrepasado.
Sin embargo, después de enfrentar ese calvario, el otrora volante de Universidad Católica tomó la decisión de hacer un drástico cambio en su vida, el cual mantiene hasta la actualidad.
Incluso, ahora con más de 40 años, Acuña se confesó y recordó los complejos episodios que vivió en ese entonces.
“Me vi acabado”, reconoció el ex jugador en alusión a esos días donde había tocado fondo, según consigna La Hora.
El día que todo cambió
“Yo no quería dejar el alcohol, me gustaba, lo pasaba bien, pero un día me vi muy mal”, complementó. Eso sí, sostuvo que una conversación que tuvo lo llevó a querer mejorar y salid adelante.
“Un día le dije a mi mamá que no tomaría más, que dejaba el alcohol, ella se río y me dijo ‘eso me lo haz dicho muchas veces’, ahí le dije que ahora sí era en serio. Desde ese día, y ya se van a cumplir 8 años, nunca más tomé”, relató.
Cabe recordar que, en su momento, Kike reconoció que debido a todos estos problemas perdió 13 millones de dólares, aunque posteriormente se logró reinventar.
“Estoy con la empresa de paltas Kike Acuña y una escuela de fútbol. Tengo dos sucursales, una en Santa Elena de Chicureo y otra en Maipú. Próximamente la idea es tener una en La Florida y Puente Alto”, reveló sobre su actual momento alejado de los excesos.