El actor no se fijó en gastos y pagó más de un millón de euros por una lujosa casa rodante, especialmente diseñada para él, que le permitirá descansar durante sus días de rodaje.
Siguiendo el clásico aforismo, una estrella no solo debe serlo, sino parecerlo. Al menos Leo Di Caprio parece hacerlo a la vista de su más reciente adquisición; una lujosa casa rodante para pasar con total confort las largas y fatigosas horas de rodaje.
A la vista de su mansión en Beverly Hills, por la que pagó 10 millones de dólares, tal parece que el actor no escatima en gastos. El actor pagó 1,3 millones de euros por el vehículo, diseñado en exclusiva para él por King Kong Production Vehicles, empresa especializada en el rubro.
Se trata de un vehículo de 16 metros de largo, pintado en un sobrio tono marrón claro. Cuenta con cuatro salidas extraíbles deslizantes, lo que le que permiten ampliar los espacios. Por fuera no parece gran cosa, pero al verlo por dentro, queda claro que Leo no se anduvo con chicas.
Todo el interior del trailer está trabajado en madera lacada, con detalles en dorado, además de suelo de mármol y granito. Tal como mostró el dueño de King Kong Production, David Rovsek a Bloomberg, el vehículo cuenta con cocina, siete televisores, dos chimeneas, un baño y una habitación personal que emula una suite.
En la gran sala de estar, se ven tres grandes sillones forrados en cuero. Allí hay una chimenea, y un televisor -incluso hay uno en el baño de invitados-. Cerca está la cocina, un pequeño bar y una mesa comedor, iluminadas por la luz natural que entra a través de las ventanas distribuidas a lo largo del vehículo.
La habitación contigua es el dormitorio principal. Ya dijimos que la idea fue replicar una habitación de lujo, con estándar de hotel cinco estrellas, nada menos. Allí, Leo cuenta con una enorme cama de dos plazas, para echar el cuerpo una vez que llega del rodaje, además de un televisor y un gran clóset.
Allí mismo está el baño. Se trata de un espacio diseñado a la medida, con mampara de vidrio reciclado y paredes de cerámica artesanal, la que demoró dos semanas en su instalación por parte de los artesanos. Solo el baño le costó 40.000 euros a Leo, unos 37 millones de pesos chilenos.
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