“Es difícil, lo estoy tratando de acompañar de la mejor manera”, reconoció el actor chileno.
Aunque constantemente es asediado por los periodistas de farándula en Argentina, Benjamín Vicuña en los últimos años no suele hablar mucho de su vida privad y menos de su familia.
Sin embargo, esta semana hizo una excepción y se refirió a un importante momento personal que enfrenta Bautista, hijo de 16 años fruto de su relación amorosa con Pampita.
En medio de una entrevista con la revista Gente, habló sobre un vínculo sentimental que inició el adolescente.
“Bautista comenzó una nueva historia de amor. Lo llevo bien, como un súper desafío de mi hijo mayor que me va exigiendo estar a la altura”, relató.
Y sobre la misma, el actor chileno reveló cómo enfrenta esta nueva etapa de su hijo y la forma en que trata de apoyarlo.
“Él trae códigos nuevos. Intento ante todo el diálogo, con su entorno, pero lo que destaco son sus responsabilidades con el colegio y que tenga un compromiso con su felicidad, que pueda ser un chico feliz”, complementó.
Los desafíos de Benja Vicuña
De todas formas, Benja evitó entrar en detalles, aunque sí dejó en evidencia la relación sentimental.
“No lo quiero ‘escrachar’ públicamente, pero anda por ahí y eso también es hermoso, el poder acompañarlo”, contó de manera escueta.
Sin embargo, se tomó un minuto para hablar sobre las grandes complicaciones que empezó a enfrentar Bautista debido a su edad.
“En algunas cosas creo que todos los adolescentes se parecen. Sin dudas es la etapa más difícil (…) Es una etapa en que adoleces muchas cosas, una etapa de revelaciones. Es una etapa de descompensación hormonal, de que lo más lindo aparentemente para muchos es el descubrimiento del primer amor, también de tu vocación”, reflexionó.
Además, reveló que “hay ciertas cosas de enfrentamiento de los estándares, con lo que está establecido, con tus padres. Es difícil, lo estoy tratando de acompañar de la mejor manera, pero en un lugar secundario porque él es libre y es único y lo sabe”.
Por último, Vicuña recalcó que la adolescencia “es una etapa delicada, entran la alimentación, la autoestima, el sexo. Es un mega desafío y también te da mucha preocupación porque sabes, yo mismo me acuerdo, es la etapa más revuelta, más vertiginosa de nuestras vidas y hay que estar ahí atajando”.
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