“Llevo siete días así con insultos”, lamentó la concejala.
Siguen los coletazos tras la filtración del video que muestra el momento en que la concejala de Ñuñoa, Daniela Bonvallet, protagoniza un altercado con los trabajadores de un restaurante.
“Yo decido quién tiene patente o no, está bien que (digan) ‘apague el cigarro’, está muy bien, pero que digan ‘ella no está en condiciones de seguir pidiendo alcohol’, soy una mujer”, se le escucha alegar en el registro grabado por testigos.
Además, la hija de Eduardo Bonvallet habría dicho las siguientes palabras: “Eres un simple miserable muerto de hambre, eres un hombre insignificante, ganas un sueldo miserable de garzón. Yo trabajo en la Municipalidad de Ñuñoa y gano millones y van a quedar todos sin pega, porque les voy a quitar la patente del local”.
Tras el revuelo que se generó en redes sociales, fue la misma Daniela quien decidió utilizar referirse a la situación.
“El día viernes me comunique directamente con los trabajadores involucrados de este hecho y les pedí disculpas, por mis dichos y el mal entendido que ocurrió. Hubo una confusión y se mal interpretaron algunas de mis palabras”, escribió en un comunicado que compartió a través de Twitter.
Y en esa misma línea, agregó: “las expresiones expuestas en medios de comunicación, no expresan realmente lo que pienso y como soy. Nuevamente mis más sinceras disculpas a todos los que se sintieron afectados por todo esto. De corazón”.
Fuertes insultos
A poco más de una semana de este hecho, Daniela Bonvallet sigue recibiendo mensajes E insultos a través de Instagram. Así lo dio a conocer por medio de distintas stories recogidas por Página 7.
“Pueden leer la agresividad, escogí los mensajes al azar, hay más fuertes. Mi Instagram nunca ha sido así, pero estoy cansada. Llevo siete días así con insultos. Tanto odio en el corazón. Soy una simple concejala que no gana millones y que mi rol es ayudar a los vecinos y ojo con esta parte: fiscalizar a la alcaldesa”, se defendió.
Además, explicó que “nací con mil cámaras de TV en mi cabeza. Mi vida siempre ha sido pública sin que yo lo quiera. Decidí ser concejala para retribuir el amor que me han dado siempre. Esto para mí es demasiado”.
“Las fotos que me mandan de mi papá con algo en el cuello muerto no las voy a publicar. Por razones obvias. Dicen que maltraté a alguien y lo que he vivido y han vivido mis hijos no tiene nombre”, reveló.
Luego, insistió: “Gano 800 mil pesos y con eso mantengo a mis hijos y con mucho orgullo. Jamás he sido millonaria porque mi padre donaba su sueldo y sigo pagando donde lo enterré porque cuando murió no tenía ni un peso. El éxito viene y va, la plata viene y va”.
“No puedo hablar”
“Jamás denigraría a un trabajador. Dije lo de las patentes porque me enojé, por los emprendedores saben que lucho porque no les cierren los locales”, aclaró.
“El tiempo me dará la razón. contaré la historia y hablaré de quién filtró el video maliciosamente, cuando termine la investigación l funcionario que me acompañó, por eso no puedo hablar”.
“El tiempo me dará la razón.”, cerró.