Los vídeos manipulados que tienen el rostro de la actriz de 34 años han sido viralizados por una decena de sitios web de contenido sexual explícito.
Internet es un mundo donde se puede encontrar un sinfín de cosas y por lo mismo hay que tener mucho cuidado. Una de las últimas "gracias" son los montajes que se realizan en vídeos de contenido sexual, reemplazando los rostros originales por los de famosos. Esta práctica se le llamó "deepfake", el cual es realizado a través de un software de inteligencia artificial, lo que lo hace más complicado saber si es real o no.
La exitosa actriz ha sido víctima de esta práctica. Un vídeo sexual falso supuestamente de ella ha sido viralizado y el vídeo ya contiene más de 1,5 millones de reproducciones en páginas para adultos.
"Intentar protegerte de Internet y su depravación es una causa perdida. Nada puede evitar que alguien corte y pegue mi imagen o la de otra persona y la coloque en un cuerpo diferente", declaró al diario estadounidense The Washington Post.
Esta práctica es más común de lo que se cree y fue la misma Johansson quién salió a desmentir su participación en estos vídeos.
"Las personas creen que están protegidas por sus contraseñas de internet y que solo las figuras públicas son hackeadas. Pero la verdad es que no hay diferencia entre alguien hackeando mi cuenta o la de la persona que está detrás de mí en la cola del supermercado", señaló.
Scarlett Johansson menciona que este tipo de contenido por muy degradante que sea no le afecta tanto. Asegura que la gente sabe lo que ha sido su carrera en el mundo de Hollywood y que "lamentablemente, hay muchas más cosas perturbadoras en la red oscura que esto", concluyó.