"En este momento la belleza es tan difícil de acceder (risas). Ahora parto mi día dando papa como tres veces. Cuando alcanzo a ducharme, uso siempre mis cremas Natura. ¡Las amo! La famosa crema de castaña, y todas. Las he probado todas. Me han ayudado mucho a reafirmar mi piel, traerla de vuelta", indica de entrada.

"Hace más de un mes volví a hacer gimnasia, porque, a pesar de que con la guagua se hace un buen ajetreo durante todo el día, no son fuerzas bien hechas. Generalmente uno pone malas posturas en el cuerpo, y saca la guata y quiebra la espalda. Te empiezan a doler la espalda, los hombros. Hay que recuperar la postura".

"Tres veces a la semana hago cardio y ejercicios específicos para mujeres que han tenido guagua. Hay unos abdominales hipopresivos, muy diferentes a los que conocemos, porque la fuerza se tiene que hacer desde adentro hacia a fuera. Uno tiene que volver a meter hacia adentro todo de nuevo, porque con la guatita todo sale hacia afuera".

Peluqueria amiga

"Nunca hay que dejar de lado la peluquería, y ha sido el gusto que me he dado. Conocí a Ricardo Ricciarelli (@peluqueria_ricciarelli). Tiene una peluquería muy íntima, muy familiar. El me atiende y siempre está pendiente", dice.

Y añade que "las mamás deben saber que el pelo se va debilitando. Con la lactancia lo mejor de ti se va para tu hijo. Muchas veces se va perdiendo la calidad de tu pelo, por eso en la peluquería me hacen masajes regularmente, ojalá cada dos semanas".

Piel vitaminizada

"Para la carita fui a Estétika Médica, la única clínica en que yo confío de verdad, porque uno no se puede poner botox cuando está en lactancia. Hay cosas que uno no puede hacer cuando da leche", indicó.

"Entonces, me estoy poniendo vitaminas, tratando de reactivar la piel, para que sola pueda empezar a regenerarse. Se reseca mucho, las ojeras se oscurecen por el mal dormir. Estoy viviendo todos los procesos que las mamás me habían contado y yo dije 'no debe ser tan así'", concluyó.