El astro mexicano tiene hasta un asistente de vocalización para dar los mejores conciertos en Chile, que parten este martes.
La tarde del lunes el "Sol de México" figuraba en la suite presidencial del Hotel Sheraton, lugar donde descansaba luego de las cinco horas de ensayo que se pegó junto a sus músicos en el Movistar Arena, la noche anterior.
El sol era fuerte, pero no tanto como el amor de sus fans, las que incondicionalmente le hacían vigilia. Una de ellas fue Rosa Canelo, una miembro del fan club Las Rojitas incondicionales, quienes lo han seguido desde su llegada a la capital. "Lo que sabemos es que a esta hora (16 hrs de ayer), está durmiendo, porque anoche tuvo un arduo ensayo de 21 a 2 de la mañana. Lo seguimos, pero no hemos podido verlo, pero siempre vamos a seguir siendo incondicionales hacia él", comentó.
Pero Luismi no sólo ensaya con su banda para sus cuatro conciertos, uno que es hoy, 20,22 y 23 de febrero, sino que también tiene un asistente de vocalización que lo está dejando más afinado que nunca, con el objetivo de dar los mejores conciertos en Chile y redimirse de sus anteriores recitales, en los cuales terminó dando bote y recibió duras críticas por su desempeño vocal.
Recordemos que el intérprete de "La Incondicional" fue considerado para presentarse en el Festival de Viña del Mar, pero fue descartado por sus reiterados problemas de voz y también de sed.
Si bien tiene una agenda apretada por estos días, tendrá el jueves 21 libre, ya que irá a Santa Cruz para visitar la viña Ventisquero, donde se ha producido un vino en su honor y podrá calmar esa peligrosa sed que tiene, según cuentan las malas lenguas.
El 22 y 23 se dedicará por completo a los últimos recitales, ya que quiere sorprender a sus fanáticas incondicionales para demostrar que Viña se perdió un gran número.