Lejos de la farándula, la ex chica reality se concentra en el crecimiento del recinto turístico que posee Mendoza, al cual le sumará un centro holístico y un local de té.
Cruzó la cordillera en busca de la corona de Miss Reef en 2002, y desde ahí nunca más abandonó nuestro país. Así conocimos a la modelo argentina Mariana Marino, quien se tomó la pantalla chica con importantes apariciones en programas como "Morandé con Compañía" y "Así Somos".
En 2012 estuvo en el reality "Mundos Opuestos" (Canal 13), donde pudimos conocer la historia de su trío amoroso junto Sebastián Roca y su ex, Agustín Pastorino.
También sufrió la filtración de un video íntimo suyo con Ronny Dance.
Un torbellino mediático, que le dio alegrías y también malas pasadas, pero que hace rato es parte del pasado de la trasandina.
Hoy, lejos de ese mundillo, su enfoque está puesto 100% en el deporte, en impartir clases de pilates y, sobre todo, fortalecerse como empresaria hotelera.
Hace tres años comenzó un proyecto de cabañas al cual bautizó "La Dominga", en honor a su abuela. Están ubicadas en Mendoza, Argentina (donde nació), y le han dado tan buenos dividendos que está en vías de expansión.
"Me empecé a preocupar de mi estabilidad económica, los años pasan y no tenía nada concreto para sustentarme. Por eso decidí empezar por mi negocio de cabañas. Tenía un terreno en Mendoza y lo aproveché para hacerlas. Ahora le estoy construyendo un salón para eventos, que finalmente quiero convertir en un centro holístico donde se hagan clases de yoga, pilates, meditación", cuenta la argentina.
Además, el próximo verano espera edificar un local para hacer una casa de té en el jardín de la explanada.
Para estar al ojo con el avance del negocio, Mariana viaja una vez al mes a su ciudad natal. "Como estamos construyendo, tengo que ir a supervisar", agrega feliz sobre su robusto complejo turístico que pronto inaugurará a todo trapo.