El comediante estaba comenzando a trabajar en El Club de la Comedia cuando le detectaron un tumor en el pecho.
Pedro Ruminot fue el invitado de esta semana a De tú a tú, donde recordó el cáncer que lo tuvo entre la vida y la muerte.
En el episodio, el ex “Club de la comedia” y actual “Socios de la parrilla” mostró su casa, en la comuna de Peñalolén, a Martín Cárcamo, donde destacaron las Gaviotas de Oro ganadas por Ruminot y su esposa, la también comediante Alison Mandel, en el Festival de Viña del Mar.
Durante la conversación rememoró el tumor que le fue descubierto justo cuando se Chilevisión había aprobado El club de la comedia, como un programa de su parrilla.
“Al fin habíamos logrado nuestro programa y yo arrastraba una tos bien jodida. Tras varios diagnósticos malos pido radiografías y me encontraron una hernia, un soplo al corazón y un tumor de 25 centímetros en el pecho. Llevábamos una semana grabando, y me diagnostican el cáncer”, recordó, puntualizando que se trató de un cáncer testicular germinal.
“Nació ahí y se alojó en mi pecho cuando nací, es de familia, la mayoría de mi familia se ha muerto de cáncer. Es un cáncer rarísimo, no ocurre a menudo, es uno cada 10 años”, explicó.
“Era esa sensación de que me iba a morir y no hice nada”
Cuando lo dejaron internado, los pronósticos fueron muy negativos. “Me dijeron ‘Te quedan 15 días de vida, no más que eso’. Con esa noticia entré en una sala común con 20 abuelitos. Fue un día muy duro. Lloré mucho, era esa sensación de que me iba a morir y no hice nada, no viajé, no hice películas, libros, la lista que escribimos cuando chicos con (Sergio) Freire”, aseguró.
Sin embargo, recordando una experiencia que sufrió cuando niño, cuando estuvo a punto de morir ahogado en la playa, hizo gala de todo su optimismo. “Al segundo día dije que no me iba a morir. Entonces volví a trabajar, nunca dejé de hacerlo, aunque vomitaba todo el día con la quimio. Yo creo que me salvó harto tener trabajo, pese a que me sentía horrible, porque para mí detenerme o echarme en la cama era morir”, manifestó.
Tras la quimioterapia, sobrellevó una operación a corazón abierto para extraer el tumor. Sin embargo, ocurrió algo inesperado. “Me abrieron y no encontraron tumor, sino una cicatriz de tumor, quiere decir que se secó con las quimio. Los doctores me dijeron que eso era un milagro, no tenían forma de explicarlo. La operación duraba 4 horas, pero duró 45 minutos. A los cinco días estaba trabajando de nuevo, llegué a grabar de sorpresa al canal, me creció el pelo al tiro, a los tres años pude tener un hijo, y ningún pronóstico que me hicieron se cumplió”, indicó el comediante.