La actriz tuvo que ser llevada de urgencia al centro asistencial y pasó por pabellón. Hoy, ya recuperada, se descargó contra la clínica.
Una lamentable situación vivió la actriz Teresita Reyes hace unos días en el centro de Santiago, al sufrir una fuerte caída que le dejó una herida en el rostro.
“Los he extrañado mucho, no he hecho muchas cosas en vivo porque me saqué la contumelia. Miren, esto es lo que queda, aquí están los puntos”, comenzó relatando en un live de Instagram.
Contó que hace una semana fue al dentista y salió con la cara muy hinchada. “Estacioné mi auto en el Registro Civil de Ñuñoa, que es un enorme estacionamiento. Entro, toda regia, saludando, los quiero, los amo y ¡sas! ¡me saco la conchemimadre”, relató.
“Pero atroz, con sangre, con cuática, con toda la gente ayudándome… no, fue un desastre”, agregó la actriz. De inmediato fue llevada a urgencias porque se había golpeado la cabeza y tenía una rotura en el rostro. “Mi hija me vio entrar, entera machucada, con sangre, para qué te digo la ropa...”, recordó.
Explicó que estuvo unos 45 minutos en la urgencia de la Clínica Santa María, donde le hicieron exámenes, radiografías y una “operación estética” en la nariz porque se le incrustaron los lentes.
“Murió” con la cuenta de la clínica
Una vez pasado lo peor, Teresita se enteró de cuánto debía pagar. Ahí comenzó otro drama.
“Llego y pido la cuenta. Ahí morí. Salió estratosférica, casi un millón de pesos por tres cuartos de hora” y que de ese monto tuvo que pagar 400 lucas. Descubrió que su seguro de accidente caducó cuando cumplió 70 años.
Para más remate, se paseó por los cuatro edificios de la clínica preguntando por los seguros y por otro doctor que le sacaría los puntos, el que nunca pilló.
Más encima, perdió el ticket de estacionamiento y después no encontraba su auto. “Estaba reventada. Salí raja, idiota”, lamentó.