“Mi gira es totalmente funable para cualquiera”: El regreso de El Bananero a Chile, el hombre viral antes de los videos virales

El Bananero adelantó lo que se viene en sus próximos shows en Chile.

El reconocido youtuber aterriza en el país para presentarse en Valparaíso, Puerto Montt y Concepción. En conversación con el Diario Pop, habló de sus inicios, las funas, los chilenismos, la depresión y adelantó las sorpresas que trae su espectáculo.

A pesar de que actualmente en internet está plagado de videos virales y creadores de contenido, muy pocas personas han logrado influenciar tanto en una generación como Adrián Maximiliano Nario, conocido en el mundo entero como el Bananero.

El estadounidense-uruguayo está en el mundo digital desde antes de la creación de redes sociales como Facebook y ha logrado mantenerse vigente, dejando su sátira huella en el corazón de sus fanáticos.

Directamente desde su casa en Miami, el humorista conversó con La Cuarta mientras se tomaba una cerveza fría para capear el calor, y adelantó lo que se viene en su seguidilla de shows que tiene agendados en Chile. Si bien el artista ya pasó por el país el año pasado, los reclamos de sus fanáticos lo terminaron convenciendo de agendar más fechas en distintas regiones y así dejar a todos contentos.

“La gira empezó en Chile, en Santiago el año pasado en mayo y fue la zorra, como dirían ahí, estuvo buena la hueá, llena de gente, casi 1200 personas. La gente respondió muy bien, fue tremendo, una locura. Y bueno hay mucha gente que dice: ‘Ah, nunca viniste a este lado, nunca viniste a este otro’, así que ahora como tengo toda la libertad de elegir a dónde voy y las condiciones se dan súper favorablemente. Mucha gente en varias regiones de Chile decían: ‘que venga acá el guatón hijo de puta este’. Entonces en esta gira de verano voy a recorrer Valparaíso, Puerto Montt y Concepción, que ya fui una vez”, señala el Bananero.

Con tantos años en el medio, y con una comunidad tan grande y activa, ha sido casi natural la forma en que el creador de contenido ha ido adoptando en su día a día palabras nacionales, sobre todo aquellas que pueden ser usadas para insultar. Respecto a los chilenismos, señala: “Me encantan, me encanta como insultan los hueones y los cabros, porque una de las cosas que hago para ganarme la vida es mandar saludos-insultos, y muchísimos son de gente de Chile, entonces me aprendo diferentes modismos y garabatos para putearlos”.

“e meto una puteada bananera, le digo conchetumare, hueón, chupa el pico, chupa pichula, cosas que he ido aprendiendo con el paso del tiempo que creo que es muy enriquecedor. La gente dice: ‘Ah, por eso son puteadas, son malas palabras’, para mí es gran parte del léxico bananero y que todo el mundo usa, todo el mundo pasa puteando. Se ha estigmatizado un poco en los últimos tiempos, ya no te dejan putear, no te dejan comentar cosas así, pero es algo que todo el mundo usa y disfruta hacerlo y creo que es muy necesario, es una liberación”, dijo.

¿Tienes un chilenismo favorito?

—Macabeo me encanta, además hay mucho macabeo. Cuando voy a un show siempre hay algún macabeo que la novia no lo dejó ir, y esos le dedicamos un CDT que es ‘cosa de trolazo’, porque es un pollerudo dominado. Manflinflero creo que es pajero, tengo muchas cosas anotadas, me he ido acostumbrando. El conchetumare es una palabra totalmente nueva, porque no es concha de tu madre.

Los inicios del Bananero

Cuando Adrian se dispuso a comenzar a subir videos a internet, el concepto de “video viral” ni siquiera existía. Plataformas como YouTube estaban dando sus primeros pasos y los parámetros de lo moral eran sumamente diferentes en estos sitios, y el Bananero encontró un nicho que en el habla hispana no estaba siendo explotado. Juntó sus conocimientos audiovisuales y los mezcló con su amor por lo bizarro y terminó entregando un contenido original que marcó el crecimiento de toda una generación, con parodias a Harry Potter, He-Man, Spiderman y tantos otros personajes de la cultura pop.

El pasado 18 de agosto se cumplieron 19 años del primer video que subió como El Bananero, el comienzo de una era que a día de hoy sigue sumando adeptos, aunque a su criterio, sus videos traspasaron las fronteras por el contexto en el que se dieron, más que por el material que ofrecía.

“No sé si es tan especial mi contenido, sino la época en donde empecé a hacer videos. Era un momento donde estaba todo muy en pañales y nadie hacía este contenido. Además nadie hacía contenido de mucha producción, internet era muy de hobby, yo como estaba en un trasfondo que trabajaba en televisión, tenía otros conocimientos técnicos y productivos, que todo lo que aprendía en el canal de televisión después lo llevaba a los videos bananeros, entonces creo que ese fue un diferencial muy grande.

Estando acá en Estados Unidos yo veía cosas en inglés y me dí cuenta que internet es el medio más libre, y a mí gustó siempre el puterío, me gustó el porno, me gustó todo eso y, unificar todo en una producción me encantaba, y eso era una cosa que se estaba haciendo acá y en Latinoamérica lo hacían, pero no a ese nivel de producción. Entonces creo que eso fue un diferencial muy grande, que junto con un poco de suerte que tuve en algunos videos que fueron virales, antes del término viral, se convirtieron en clásicos.

Vos ves ‘Harry el sucio Potter’, ‘John salchichon Rambo’, ‘El hombre que araña’, ‘El impotente Hulk’, ‘Muñeca System’, y alguno que otro más, y la gente dice que está al nivel de producción que puedes ver hoy y eso creo que hace que la gente vuelva y regrese a ese momento cuando era adolescente y se cagaba de la risa de todo y no tenía todos los problemas que tiene hoy”, señala el mítico youtuber.

Considerando lo estrictas que son ahora las reglas comunitarias de las principales plataformas digitales, ¿crees que El Bananero hubiera tenido el mismo éxito si estuviera dando sus primeros pasos en internet?

—Ni en pedo. El Bananero que llegó a ser tan masivo nunca hubiera podido existir. Yo de todas maneras sigo haciendo mis cosas, porque la plata no me entra por YouTube, no me entra por Instagram, no me entra por TikTok, me mantienen mis fans, mi gente. Soy un eterno agradecido a la legión enorme de fans, que son súper leales, porque yo con publicidad no gano nada, la plata la hago con los saludos, con las donaciones que me dejan en el programa Radio Garka los viernes, la gira que estoy haciendo y cuando compran mis productos.

Con las reglas de hoy en día, por ahí podría hacerlo, pero no hubiese tenido la tremenda infraestructura que tengo. Estoy seguro que hay muchos creadores de contenido que le gustaría zarparse y mandar todo a la concha de la madre, porque es desmotivante que te esfuerces mucho en un video y que te lo bajen por contenido, por palabras que usas y todo eso te dice: ‘no puedo hacer lo que me gusta’ y esos terminan haciendo el contenido genérico que hacen todos, que es replicar trends, hacer los mismos tiktoks que hace todo el mundo. Es cerrar el culo y cagarse, yo por suerte como vengo de la vieja escuela y la gente apoya mi contenido, me puedo dar el lujo de hacer lo que se me cantan los huevos.

Obviamente le tengo que bajar un poco el tono, tenés que aprender a buscar diferentes formas de decir las cosas, pero en la gira no, la gira es totalmente El Bananero 100%, totalmente funable para cualquiera. Si mi contenido que hago en la gira lo viera la manada de ofendibles que hay en todos lados, no creo que les guste mucho. Pero por eso es un show para la gente que lo puede tolerar, que le gusta eso y que no tiene esa hipersensibilidad que existe hoy en día.

¿Cuáles han sido tus videos con más denuncias o que hayan hecho enojar a algún famoso?

—El primero de ‘Iván el trolazo’ fue donde tuve el primer problema legal, porque la marca Mattel son los dueños de He-Man, y como estaba utilizando a He-Man como un personaje homosexual, no les gustó y me bajaron el video de YouTube, inclusive me bajaron la cuenta, ese es el poder que tiene una empresa grande contra un youtuber. Después se armaron leyes que defendían por ahí a los youtubers, pero a mí nunca me defendieron, y está bien porque yo no quiero que me defiendan, que me chupen los huevos. Después yo me metía por ahí con celebridades, por suerte Justin Bieber nunca saltó, porque a ese le he dado por la cabeza, pero ha pasado con un par de celebridades de otros países, no los quiero mencionar, pero me mandaban cartas, documentos de denuncias, todo eso y no pasó nada.

Pero en sí hubo un cambio radical en el paradigma de hasta cuánto te podés ofender y cuánto podés hacer al respecto, porque antes dejabas un comentario y no pasaba nada, pero ahora se junta un montón de gente que piensa que lo que haces está mal, y ya te atacan en manada y te denuncian, te denuncian, te denuncian, y los dueños de las redes sociales dicen: ‘cómo rompen los huevos estos, vamos a tener que bajar este video, así no joden más’, pero creo que está se está tranquilizando un poco eso.

Sus fans y la cultura de la cancelación

Mientras otras celebridades se molestan cuando les piden fotos en la calle, en medio de la entrevista el Bananero se tomó el tiempo de recibir a un grupo de fanáticos que llegó hasta su casa solo por un saludo. Según comenta, la dirección de su domicilio aparece en Google Maps, y a pesar de que la ha eliminado en varias oportunidades, ya se acostumbró a que constantemente llegue gente que no conoce a tocar su puerta. Y es que el humorista está consciente de que lo que tiene es gracias a su comunidad, por lo que intenta ser lo más cercano posible, a tal punto que es muy normal en su rutina escuchar que lo insultan a lo lejos como una muestra de cariño.

¿Qué es lo primero que te dice un fanático cuando te ve en la calle?

—Gordo chupa pija, la concha de tu madre Bananero, sape, varía. Yo creo que muchos que no me conocen personalmente dicen que cuando me vayan a ver y me van a putear, pero después cuando me ven se ponen como loquita, y les empieza a temblar la cola, es como que se ponen nerviosos. Me pasaría a mi lo mismo si una figura que yo admiraba de adolescente, capaz que si veo a Slash me da vértigo en la cola, entonces a muchos les tiembla la mano y no saben qué decir. Yo viéndolo del otro lado es lindo y yo trato de relajarlos, ‘tranquilizate chupa verga’ le digo y se ponen bien.

Tu gira se llama “Cancelame ésta”, ¿qué opinas de la cultura de la cancelación?

—Yo tengo un récord. Creo que la cancelación trata de callar o de apagar cosas, el tema de cancelar viene de cuando cancelaban un show porque no era exitoso, nadie lo veía y entonces cancelaban el show. Después adquirió otro tipo de significado, que no es que te cancelaron porque no eras exitoso, sino que cancelan algo porque a este colectivo de gente, que piensa que tiene una superioridad moral y tiene el derecho y el poder decir: ‘esto a mí no me gusta, entonces tiene que dejar de estar’, lo cual es bastante egoísta, a mi parecer, si no te gusta, no lo mires. Pero uno puede estar en una posición de superioridad moral y pensar que decide por otros y eso es algo que me paso bien por los cocos, como dirían ahí.

Parte de la cancelación ha sido que me bajaron un par de canales de YouTube, una cuenta de Tik Tok, mi Facebook de 2.5 millones de seguidores, varios post, varios vídeos. Entonces como que decís: ‘ok vamos a tratar de sacar algo bueno de esto’ entonces dije: ‘ya que puedo salir en una gira y que nadie me va a andar juzgando por eso, vamos a hacer lo que se me cantan los huevos’, y el contenido es 100% Bananero, no tengo ningún tapujo, se ven pichulas gigantes en la pantalla y la gente se vuelve loca, le encanta porque es algo que que ya no se puede ver, y se utiliza un lenguaje bastante coloquial, bastante grosero, sin ningún tipo de censura y hay gente que se acostumbró.

El público que va a mis shows tiene entre 20 y 40 años, entonces vienen de la época donde si no te gustaba algo, lo mandabas a la concha de su madre y no pasaba nada. Es como que la gente extraña un poco eso y creo que por eso disfruta tanto el show, todos salen cagados de la risa y es como una explosión de poder hacer y decir todo lo que sea.

En el mundo de los comediantes existen los hecklers, los que insultan al comediante y no lo dejan actuar, en mis shows son todos hecklers. Desde que empiezo, me dicen: ‘gordo la concha de tu madre, hijo de puta, chupame la pija, estás hecho mierda, Arjona (es lo que más me lastima)’, y eso es parte del show. Eso es lo lindo, que ellos puedan decir todo y yo les puedo decir de todo, es como una alquimia de puteadas y todos la pasamos bien.

¿Te has agarrado a combos con algún fanático en el escenario?

—Justo cuando fui a Chile, tenemos una sección que se llama ‘Es hora de un salute’, que es una sección de Radio Garka, y subieron como 10 personas y todos nos pusimos a hacer fondo blanco de cerveza mientras yo cantaba. Y había uno que agarró una pistola de agua con forma de pija, y me empezó a tirar pistolazos en la cara mientras yo cantaba, yo le decía: ‘pará, déjame cantar’, y le pegué un par de patadas en el culo, pero no le saque la pistola, y seguí con el show y él seguía con la pistola. Yo le decía: ‘vos pelado deja de dispararme porque te voy a meter la pistola en el culo’. Por suerte, se dio cuenta, se comportó y siguió el show, pero nunca pasó a tintes de mala onda, ni nada. Siempre hay muy buena onda, solo que somos todos jodedores, nos gusta el hueveo, me gusta la huevada y es parte de eso.

La depresión y el consumo

Aunque el Bananero es reconocido por su capacidad para lanzar chistes como metralleta, y donde sea que esté siempre anda con una gran sonrisa y gritando “sape” a quien se le cruce por su camino, también ha hablado públicamente de salud mental. Hace algunos años el comediante pasó por momentos complicados cuando lidiaba con una fuerte depresión que lo mantuvo un tanto alejado de internet, hasta que recuperó las ganas de transmitir alegría.

¿Teniendo la carga de divertir a tus fans, cómo llevas el tema de la salud mental actualmente?

—Ahora estoy en un lugar mucho más estable, mucho mejor. La depresión fea, que fue una depresión extendida y que me perjudicó mucho, fue que se dieron varios factores en mi vida. Mi padre tuvo una enfermedad, yo tuve unos cambios en mi vida sentimental, empecé el consumo pesado de alcohol y narcóticos y eso uno lo hace para de cierta forma anestesiar la cabeza, porque no lo está pasando bien. Estaba sin dudas deprimido. Fue la época donde hubo menor contenido bananero, porque la verdad no tenía ganas de producir, no me salía nada, ninguna idea. Pero después empecé a encauzarme, tratar de salir de ese pozo, conocí a mi novia actual que me ayudó mucho porque es psicóloga, entonces me decía qué hacer. La verdad es que me ayudó y yo le sigo metiendo al carrete, pero dejé otras cosas que me bajoneaban, pero sin dudas creo que la depresión es algo muy común del humorista, porque es alguien que tiene que estar siempre contento, siempre mostrando su mejor cara, siempre tratando de mostrarse feliz y cuando se apaga la luz te bajonea, te pone triste, pero bueno, todos tenemos problemas, todos tenemos cosas.

Yo te digo la verdad, me considero súper privilegiado de hacer lo que hago y tener la vida que tengo y que la gente me muestre el amor en la calle, en los shows, en los comentarios. No me puedo quejar, yo tengo que estar feliz, papá. Si me muero en una semana ya está, ya hice todo lo que tenía que hacer. Espero que no me muera en una semana jajaja.

Has comentado que en las giras a veces te da pánico escénico ¿cómo lo enfrentas?

—La verdad, eso fue una exageración, lo que me da es vergüenza. No me puedo presentar de la mejor forma, yo creo que lo mejor que hago es escribir y editar los videos. El tema del escenario era algo que yo hacía cuando era joven, con bandas, porque toqué durante mucho tiempo con muchas bandas y siempre que salí a tocar, tocaba borracho. Entonces la primera vez que me presenté en un show, había muchísima gente y como que dije: ‘para, qué hago acá’, porque te viene como un vértigo en el culo, tengo que hacerlos reír a todos, qué pasa si en un momento se me pone la cabeza en blanco y no puedo responder rápido como respondo en cualquier otro momento. Y el alcohol simplemente lo que hace es que no te das cuenta que la estás cagando, porque te dan esas lagunas mentales, solamente que estás borracho y no te das cuenta. Yo antes de todos los shows estoy súper nervioso y siempre trato de mandarme un par de tragos para ablandar un poco esa tensión, pero también es parte de El Bananero, la joda, el alcohol…hablando de eso me iré a buscar otra cerveza, permiso.

¿Cuántas cervezas te puedes tomar en un día?

—Esta es como la quinta, hoy me tomé un whisky porque tenía ganas, dije: ‘es lunes, me voy a chupar algo’. De cierta forma es una semana que viajo, estoy de gira, si tengo una semana entera de descanso trato de no tomar en la semana, y cuando llegue el viernes hago el programa y me emborracho, pero hoy tengo que editar un par de cosas, filmar un par de cosas, y creo que no pienso tanto a la hora de producir cuando estoy con un par de cervezas arriba, eso sí después editar medio copeteado, medio carreteado…como que cuesta, como que no es lo mismo.

Me gusta la cerveza para actuar y para todo, pero para editar es problemático porque te empiezan a pesar las pelotas y te cuesta. A veces también ayuda, porque uno no duda tanto, yo soy muy perfeccionista en el tema del contenido y cuando estás medio borracho no lo dudas tanto.

Shows en Chile

Este verano el Bananero llega al país para poner su cuota de desorden en Valparaíso, Puerto Montt y Concepción, en una seguidilla de shows que se realizarán entre el 28 de enero y el 4 de febrero, donde repasará sus éxitos musicales, hará competencias y mostrará videos exclusivos que no pueden ser compartidos por internet.

Una de las secciones favoritas constaba de usar Omegle para “interactuar” con algunos usuarios de la plataforma, sin embargo hace un par de semanas el sitio fue dado de baja, por lo que tuvo que sacar esa parte del espectáculo, pero para tranquilidad de sus fanáticos, encontró una alternativa que está a la altura. “Ya tenemos un reemplazo de Omegle, que por las dudas no lo voy a mencionar para que no lo bajen. Es cantidad y calidad, así que creo que en el verano chileno va a funcionar a la perfección”, adelanta.

“En la gira muestro cosas que produje junto a Andrés Di Bono, que es quien me acompaña en Radio Garka, y otro personaje del programa que me ayudaron a hacer un documental que se muestra la gira, es el documental de la casa del Bananero, donde muestro todas las escenas porno que se crearon acá, y las explico, y eso le encanta a la gente, se ponen como loquitas. Con ellos y otra gente más tengo pensado hacer la película Bananera, que mi idea es que salga en el 2025, cuando se cumplen 20 años desde que saqué elbananero.com. Son 20 años haciendo pajerías, papá, imagínate…hay que celebrarlo”, concluyó el youtuber.

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