"Mostramos qué pasó con las personas al apagar las cámaras"

Fue en uno de sus chorrocientos viajes a lo largo de Chile cuando la mente de Francisco Saavedra se pegó un chispazo al oír el sabio refrán de José Martí. Sí, ese que dice que para dejar su legado en el mundo, es importante plantar un árbol, tener un hijo y escribir un libro. ¿Lo cacha, cierto?

Y fíjese que la pluma le ha funcionado parejito, porque a sus textos les ha ido de lujo, y el rostro de Canal 13 ya va por el tercero. Tal cual, pues en su nueva joyita, llamada "Luchadores", el animador con risa de alto guataje se pegará un viajecito mental tras entrevistar y profundizar en la vida de algunos personajes que ha conocido en este espacio. ¡Hasta el "Catador" lo ayudó en la producción!

En exclusiva, Saavedra se dio el tiempo para conversar con La Cuarta, mientras andaba grabando en el sur del país, y reveló secretos para la pípol lectora.

"Quisimos hacer un libro con otro nombre, porque queríamos ir más allá del programa de televisión. Aunque nos volveremos a encontrar con esos personajes que salieron en el espacio, acá vamos a ver qué pasó con sus vidas después de estar en el 'Lugares'", explicó.

- ¡Güena!

Por ejemplo, la primera historia es 'La lucha por vivir de Janet González', que trata de esta mujer de Curacautín que subió el volcán conmigo y cuando estábamos en la cima me cuenta que tiene cáncer. Me reencontré con ella en 2019 y me decía que el cariño de la gente le había dado fuerzas para vivir.

- Qué fuerte el impacto del programa en el público, ¿cierto?

Sí, lamentablemente ella falleció, pero su marido aparece en mi libro. Y eso es lo mágico de este trabajo, que te muestra qué pasó con esas personas cuando apagamos las cámaras.

- Son reales luchadores...

Son personas que tienen como virtud conocer su entorno, saben lo que ocurre a su alrededor y quieren hacer algo para mejorarlo. Son personas cojonudas y no sé realmente si uno tiene el valor para hacer lo que hacen.

- Me contó un pájaro algo con unos árboles, ¿qué es?

Una pareja de La Junta (Aysén) que entrevistamos nos pidió si podíamos plantar árboles. Nosotros contamos todas las palabras de su capítulo, que eran 3.179, por lo que plantamos ese número de árboles para reforestar.

- ¿Qué momentos aprovechas para escribir?

Siempre ando con una bitácora, aprovecho los viajes. Si se me viene una idea, la escribo en el celular. Acá hasta el 'Catador' me ayudó con las fotos.

- ¿Se atrasó el lanzamiento?

Estaba listo en septiembre del 2019, pero tuve que esperar y el libro fue mutando. La verdad, fue bueno, porque eso nos dio tiempo para investigar más y que otras cosas fueran pasando. Lo tiramos cuando ya estaba maduro, después de un año y medio de trabajo.

- Hasta te diste algunos gustitos...

Sí, me di el lujo de entrevistar a Pedro Cayuqueo y Felipe Berríos. Quería que él me hablara del rol de la Iglesia y porque lo encuentro un ser admirable.

- ¿Y Pedro?

Es una de las personas que más entiende todo lo que está ocurriendo con el conflicto mapuche, y en el libro lo explicará con peras y manzanas. ¡Es fascinante!

- ¿Tener tus propios libros era un sueño?

Siempre lo tuve. Aunque acá me ayudan mucho, existe todo un equipo detrás. Siento que esta es la forma de dejar una huella importante. Este es un libro distinto a los anteriores, me da gusto.