Aunque en los días previos un posible fracaso fue tema de conversación, y en la antesala se anticipó un escenario más favorable debido a la masiva presencia de venezolanos, George Harris tuvo una complicada presentación en el Festival de Viña.

Desde su primer minuto sobre el escenario de la Quinta Vergara, Harris agradeció no solo a Chile, sino que también a su natal Venezuela, ya que la galería era ampliamente dominados por las banderas de su país. Y de ahí que se coreó su nombre de forma insistente en los primeros segundos.

Sin embargo, su estilo de comedia no logró cautivar a toda la audiencia en los primeros minutos, ya que también se comenzaron a escuchar pifias. Y el comediante respondió a la audiencia en contra, haciendo un llamado a que respetaran a quienes sí lo querían ver.

Fue ahí que Harris comenzó a pelear con la audiencia que estaba en su contra.

“Yo no entiendo a la gente que compre una entrada para pifear toda la noche, se van a quedar sordos”, dijo de partida.

“Al que no le guste, ve a comprar un refresco o una empanda. Vas a estar toda la noche [sonido de silbido] ¡Levántate a una venezolana marico! ¿Vas a estar toda la noche silbándome? ¡Por eso te vas a quedar solo hueón! ¡Te vas a desinflar! Eso no lo puedo entender, bájale, O sea, no te gusta: Ve por una refresco, besate con la polola, al pololo, haz tu momento íntimo, no entiendo, ¿Qué pasó? ¿Qué les hice? ¿Cuál es la pelea?“, dijo.

Además, apuntando a la platea baja, reconoció que “acá hay monstruos”. Pero luego, apuntando a la galería llena de venezolanos, agregó: “pero allá rugen”.

La “minoría” que se hizo escuchar

Pese a los intentos, y la completa ausencia de remates en sus chistes, George Harris no logró concretar su show como esperaba y los animadores del Festival aparecieron en escena para darle apoyo.

Y fue ahí que Rafael Araneda reconoció que había “una minoría” en contra del comediante venezolano, pero de igual forma impulsó su show y le entregó un consejo: dar más velocidad a su presentación.

Tras retomarla, y seguir con una recepción tibia de parte de la audiencia, George Harris llegó a suspirar. “Señor, ten piedad”, clamó en medio de tibios aplausos.

En otro momento, y ante nuevas pifias, George Harris no aguantó más y se volvió a pelear con la audiencia. “Me da risa el que está pitando, ojalá tu tengas la carrera que tengo yo. Ojalá que la tengas. Que tengo 20 años haciendo esto y aquí en tu país, con todo lo que te da rabia, llené el Movistar. ¡Cállate!”, exclamó.

“Amigo, vete un rato al baño y jálate el muñeco... ñaaaa... ñaaaa... y te relajas, te reconecta con la vida”, agregó mientras los chistes eran una ausencia y parte de la audiencia le gritaba de respuesta los “Chao, chao, chao”.

“Bueno, bueno, bueno. ¿Qué les digo yo? Así es complicado, te lo digo. No quiero insistir en esto, porque esto es luchar contra una marea, qué lastima que ganen los malos siempre“, cerró antes de despedirse.

“Ni Xuxa sufrió tanto”, reconoció en un intercambio posterior con los animadores antes de que le permitieron cerrar y Karen proclamase que “la tercera es la vencida”.

Y en ese cierre, recurrió a la música del Puma Rodríguez y Pimpinela como último recurso para tener algo de aplausos, pero las pifias y los gritos de “Chao” seguían insistiendo.