La abogada frenó en seco al hombre acusado de agredir físicamente a su expareja por un particular comentario que hizo durante el programa Carmen Gloria a tu servicio.
Este lunes se emitió un nuevo capítulo de Carmen Gloria a tu servicio, en donde la abogada se enfrentó a su caso de una expareja que quería vender un departamento que fue adquirido durante el matrimonio.
Fue entonces que la mujer, Nelly, reveló que su exesposo Francisco la había agredido físicamente durante la relación, e incluso su hija relató los hechos de violencia que vivió por culpa de su padre.
Nelly pidió el 80% de la venta del departamento, por todos los “años de sufrimiento y humillaciones” que vivió en la relación.
Francisco entonces se justificó diciendo que su ex se embarazó de otra persona durante el matrimonio. “Lamentablemente, uno tiene que recordar cosas tristes, amargas y que no corresponden. Una cosa lleva a la otra, ella conoció a otra persona y yo lo lamento”, aseguró el hombre.
Sin embargo, Carmen Gloria frenó en seco a Francisco y lo increpó por un comentario que realizó. “¿A qué se refiere con la frase ‘ningún hombre se hubiera quedado con las manos peladas después de eso’?”, consultó la abogada, a lo que el demandado señaló se refería a quedar “aplaudiendo”.
Por lo que Arroyo le consultó qué era lo que debería haber hecho una persona en ese caso.
“En esa parte, tengo muchos sacrificios…”, comenzó a decir el hombre.
“Sea más hombrecito”
Sin embargo, las palabras de Francisco molestaron profundamente a la abogada, quien lo interrumpió e increpó duramente.
“Ya caballero, a ver, cortemos la retórica, aquí el sacrificio es de ambos, si usted no es ningún santo y no me va a vender la pomada a mí, estoy vieja para eso. Sea más hombrecito”, lanzó Carmen Gloría.
En esa misma línea, agregó que “tiene 71 años, tiempo y evolución suficiente para entender que los actos aberrantes que cometió durante los años que estuvo casado, no corresponden. Hoy son considerados pero irrefutablemente un delito, cualquier hombre que le pega a una mujer se va preso”.
“Así que córtela de la retórica de que yo soy un santo, que yo trabaje (...), porque nada de eso justifica violentar a una mujer”, sentenció la abogada en el programa.
Finalmente, Arroyo determinó que el inmueble sería vendido y Nelly iba a recibir el dinero que había pedido.
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